Página 370 - Mente, C

Basic HTML Version

366
Mente, Cáracter y Personalidad 2
carácter de Cristo transforma profundamente sus efectos. La gloria
de Dios, revelada por encima de la escalera, puede ser apreciada
únicamente por quien progresa en la ascención y es conducido cada
[816]
vez más alto, hacia los blancos más nobles que Cristo revela. Todas
las facultades de la mente y el cuerpo deben ser comprometidas en
la perfección.—
Nuestra Elavada Vocacion, 70 (1884)
.
Una aproximación positiva
—El cielo toma nota de aquel que
lleva consigo una atmósfera de paz y amor. Tal persona recibirá
su recompensa. Permanecerá en el gran día del Señor.—
Nuestra
Elavada Vocacion, 236 (1886)
.
La relación con Dios debe ser personal a pesar del consejo y
la educación
—Si bien la educación, el adiestramiento y el consejo
de gente de experiencia son esenciales, debería enseñarse a los
obreros que no confíen plenamente en el juicio humano. Como
libres instrumentos de Dios que son, todos deberían pedirle sabiduría.
Cuando el alumno depende totalmente de los pensamientos de otro,
y no va más allá de la aceptación de sus planes, ve solamente por
medio de los ojos de ese hombre, y en ese sentido es sólo un eco del
otro. Dios trata con los hombres como seres responsables. Obrará
por medio de su Espíritu en la mente que ha puesto en el hombre, si
éste está dispuesto a darle la oportunidad de hacerlo y lo reconoce en
sus actividades. Ha establecido que cada cual emplee por sí mismo
su mente y su conciencia. No es su intención que alguien se convierta
en la sombra de otro, para expresar únicamente los sentimientos de
ese otro.—
Testimonies for the Church 5:724, 725 (1889)
.
Dios aprueba el más elevado desarrollo de la mente
—Si la
mente está santificada por el amor y el temor de Dios, su más elevado
desarrollo recibe la plena aprobación divina. Los hombres humildes
que eligió Cristo estuvieron tres años con él, sujetos a la influencia
refinadora de la Majestad del cielo. Cristo fue el más grande educa-
dor que el mundo haya conocido.—
The Review and Herald, 21 de
junio de 1887
;
Fundamentals of Christian Education, 47, 48
.
La mente es el origen de todas las acciones, buenas o ma-
[817]
las
—El [Dios] preparó esta habitación viva que es la mente; fue
maravillosamente “entretejida”; es un templo que el Señor mismo
creó para que fuera la morada de su Santo Espíritu. La mente con-
trola al hombre en su totalidad. Todas nuestras acciones, buenas o
malas, tienen su origen en ella. Es la mente la que adora a Dios y se