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La enseñanza por la naturaleza
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santa pareja transgredió la ley del Altísimo, el esplendor del rostro
de Dios se apartó de la faz de la naturaleza. Esta, ahora está arruinada
y mancillada por el pecado. Pero las lecciones objetivas de Dios
no se han obliterado; aun ahora, cuando se la estudia e interpreta
correctamente, habla de su Creador. ...
La manera más eficaz de enseñar acerca de Dios a los paganos
que no le conocen, es por medio de sus obras. De esta manera, mucho
más fácilmente que por cualquier otro método, puede hacérseles
comprender la diferencia que hay entre sus ídolos, obras de sus
manos, y el verdadero Dios, el Hacedor de los cielos y la tierra. ...
En estas lecciones que provienen directamente de la naturaleza, hay
una sencillez y pureza que las hacen del más alto valor para otros,
además de los paganos. Los niños y los jóvenes, y todas las clases
de alumnos, necesitan las lecciones que se derivan de esta fuente.
La belleza de la naturaleza, por sí misma, aparta al alma del pecado
y de las atracciones mundanas, y la lleva hacia la pureza, la paz y
Dios.
Por esta razón, el cultivo del suelo es un buen trabajo para los
niños y jóvenes. Los pone en contacto directo con la naturaleza y el
Dios de ella. Y para que tengan esta ventaja, debe haber, en cuanto
sea posible, en relación con nuestras escuelas, grandes jardines y
extensos terrenos para el cultivo.
Una educación recibida en tal ambiente está de acuerdo con las
indicaciones que Dios ha dado para la instrucción de los jóvenes;
pero está en directo contraste con los métodos empleados en la ma-
yoría de las escuelas. ... La mente de los jóvenes se ha ocupado con
libros de ciencia y filosofía, donde las espinas del escepticismo están
tan sólo parcialmente ocultas; con historias de cuentos de hadas,
vagos y fantásticos; o con las obras de autores que, aunque escriben
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acerca de temas bíblicos, entretejen con ellos sus interpretaciones
caprichosas. La enseñanza de tales libros es semilla sembrada en
el corazón. Crece, lleva fruto, y se produce una abundante mies
de incredulidad. El resultado se ve en la depravación de la familia
humana.
Un regreso a métodos más sencillos será apreciado por los ni-
ños y jóvenes. El trabajo en el jardín y el campo proporcionará un
cambio agradable de la rutina cansadora de lecciones abstractas a
las cuales no se debieran nunca limitar las mentes juveniles. Será