Durante muchos años prestó un excelente servicio al cuerpo de
pastores y evangelistas, hasta que las condiciones cambiantes de la
cultura y la sociedad, tales como se dan en este tiempo, han requerido
que el matedial de
Evangelism
se publique
in extenso
para beneficio
de nuestros obreros de la América latina.
Esta nueva edición completa de El Evangelismo no solamente
presenta los bien establecidos principios guiadores que deben mode-
lar la obra de nuestros evangelistas e instructores bíblicos, sino que
también ofrece una riqueza de consejos menudos con respecto a la
aplicación de aquellos principios. Debido a que expone ampliamente
[6]
las preciosas instrucciones que el Señor ha dado a través de los años,
constituye un verdadero manual de evangelismo para el movimiento
adventista.
En la labor de reunir y organizar en orden lógico muchas de las
declaraciones que se hallaban en diferentes fuentes, se encontró que
ciertas instrucciones se repetían constantemente. Por ello, al tratar de
presentar al lector todo el material que contribuye al esclarecimiento
del tema, sin incurrir en una repetición indebida, se seleccionaron
solamente los párrafos o los grupos de párrafos más pertinentes. En
algunos casos, las frases que implicaban repetición se eliminaron
aun de los extractos breves, pero en cada caso se consigna la omisión
correspondiente mediante el empleo de puntos suspensivos. Sin em-
bargo, se ha ejercido gran cuidado, a fin de presentar declaraciones
de suficiente extensión como para que ofrezcan el marco exacto
correspondiente al consejo dado.
Se ha procurado que cada sección constituya de por sí un estudio
completo del tema que considera. Ello ha obligado a un cierto grado
de repetición inevitable del pensamiento que destaca la instrucción
impartida. Como auxilio para poder citar rápidamente las declara-
ciones principales de este volumen, los compiladores introdujeron
subtítulos que aparecen en tipo más pesado. Al fin de cada extracto,
se consigna la fuente correspondiente, y como auxiliar adicional
para el lector, en el caso de las citas de manuscritos, se da la fecha
en que fue escrito, y en las otras referencias, la fecha de la primera
publicación de la obra correspondiente.
El conocimiento de la época en que se dio a conocer la declara-
ción pertinente, servirá como guía provechosa para la aplicación del
consejo, ya que nuestra obra debe llevarse a cabo bajo condiciones