Subamos la escalera de Pedro, 17 de marzo
Vosotros también, poniendo toda diligencia por esto mismo, añadid a vuestra fe virtud; a la virtud, conocimiento; al
conocimiento, dominio propio; al dominio propio, paciencia; a la paciencia, piedad; a la piedad, afecto fraternal; y al
afecto fraternal, amor.
2 Pedro 1:5-7
.
Indicad a los jóvenes la escalera de ocho peldaños de Pedro y no coloquéis sus pies en el peldaño más alto sino en el más bajo, y
con cálidos ruegos instadlos a trepar hasta la misma cumbre.
Cristo... es la escalera. La base de ella está firmemente asegurada en la tierra por su humanidad; el peldaño más alto alcanza
hasta el trono de Dios por su divinidad. La humanidad de Cristo abraza a la humanidad caída en tanto que su divinidad se ase al
trono de Dios. Somos salvos cuando ascendemos peldaño tras peldaño la escalera, mirando a Cristo, ascendiendo paso a paso hasta
la altura de Cristo, de modo que él sea hecho para nosotros sabiduría, y justicia, y santificación y redención. Fe, virtud, ciencia,
templanza, paciencia, bondad, amor fraternal y caridad, son los peldaños de esta escalera. Todas estas gracias deben manifestarse en
el carácter cristiano; y “haciendo estas cosas, no caeréis jamás. Porque de esta manera os será otorgada amplia y generosa entrada en
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el reino eterno de nuestro Señor y Salvador Jesucristo”.
2 Pedro 1:10, 11
—
La Educación Cristiana, 105, 106
.
No debéis pensar que tenéis que esperar hasta que hayáis perfeccionado una gracia antes de cultivar otra. No, deben crecer juntas,
alimentadas continuamente por la fuente del amor. Cada día que viváis podéis estar perfeccionando los benditos atributos plenamente
revelados en el carácter de Cristo. Cuando hagáis esto infundiréis luz, amor, paz y gozo en vuestros hogares.—
Comentario Bíblico
Adventista 7:955
.
No os sintáis abrumados por la gran cantidad de trabajo que tenéis que hacer en el espacio de vuestra vida, pues no se requiere de
vosotros que lo hagáis todo a la vez. Aplicad toda facultad de vuestro ser a la tarea del día, aprovechad toda preciosa oportunidad,
apreciad las ayudas que Dios os da y avanzad paso a paso por la escalera del progreso. Recordad que habéis de vivir solo un día a la
vez, que Dios os ha dado un día, y los registros celestiales mostrarán cómo habéis valorado sus privilegios y oportunidades.—
Mensajes
para los Jóvenes, 43
.
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