Página 82 - Servicio Cristiano (1981)

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Servicio Cristiano
Cuando terminan las clases
Al finalizar los cursos hay oportunidad para que muchos va-
yan al campo como colportores evangélicos. El colportor fiel entra
en muchos hogares, donde deja material de lectura que contiene
la verdad para este tiempo. Nuestros estudiantes deben aprender a
vender nuestros libros. Hay necesidad de que hombres de profunda
experiencia cristiana, hombres de mente bien equilibrada, fuertes y
bien educados, se dediquen a este ramo de la obra. Algunos tienen
el talento, la educación y la experiencia que los capacitarían para
educar a los jóvenes en el colportaje, de tal manera que se obtenga
mucho más de lo que se hace ahora. Los que poseen esta experien-
cia tienen un deber especial que cumplir en la enseñanza de los
demás.—
Consejos para los Maestros Padres y Alumnos acerca de la
Educación Cristiana, 532
.
El ministerio del canto
Los estudiantes que han aprendido a cantar dulces himnos evan-
gélicos con melodía y claridad, pueden hacer una buena obra como
evangelistas cantores. Hallarán muchas oportunidades para emplear
el talento que Dios les ha dado y llevarán melodía y alegría a muchos
lugares solitarios oscurecidos por el pesar y la aflicción, cantando
para aquellos que tienen pocas veces el privilegio de asistir a una
iglesia.
Estudiantes, salid a los caminos y los vallados. Esforzaos por
alcanzar a los hombres de las clases superiores tanto como a los
de condición humilde. Entrad en los hogares de los ricos como
en los de los pobres, y a medida que tengáis oportunidad, pregun-
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tad: “¿Les agradaría que cantásemos algunos himnos evangelicos?”
Luego, al enternecerse los corazones, se abrirá el camino para que
ofrezcáis algunas palabras de oración pidiendo la bendición de Dios.
Pocos se negarán a escuchar. Un ministerio tal es verdadera obra
misionera.—
Consejos para los Maestros Padres y Alumnos acerca
de la Educación Cristiana, 424
.
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