Página 57 - Testimonios Acerca de Conducta Sexual, Adulterio y Divorcio (1993)

Basic HTML Version

Consejos a Walter y Laura
53
corre el peligro de abandonar a Cristo, de obrar con descuido, pues es
maldispuesta para escuchar consejos sabios. El consejo amoroso de
sus padres se pierde en oídos sordos. ¿Podría, hermana mía, pensar
seriamente en recibir consejo de la gente experimentada? ¿Se dejará
guiar por sus amigos? ¿Desoirá el consejo de sus padres? ¿Tomará
su caso en sus propias manos?
Desandando los pasos
—Espero que cambie su manera de con-
ducirse, pues si el Señor alguna vez habló por mi intermedio, ahora
le dice que desande sus pasos. Sus pasiones son fuertes; sus princi-
pios corren peligro, y Ud. no considerará ni seguirá el buen consejo,
el único que es claro, seguro, conveniente y digno de ser seguido.
¿Resolverá hacer lo correcto, ser juiciosa, y prestar atención al con-
sejo que le he dado en el nombre del Señor? Dios la ha dotado de
capacidades. ¿Las malgastará al azar? Los esfuerzos mal orientados
la conducirán más fácilmente a un destino equivocado que al co-
rrecto. ¿Permitirá Ud. que continúen los años de caprichos, chascos
y vergüenza dejando tantas malas impresiones en las mentes de
los demás por su conducta negativa y la incapacidad de ejercer la
influencia que debería haber ejercido?
El rumbo que ha tomado su vida es tal que permite que se hable
mal de todo lo bueno que posee. Ud. se ha tornado agria, carente de
santidad y profana. Para poder lograr lo que Ud. cree que es libertad,
toma decisiones que, si las llevara a cabo, caería en una servidumbre
peor que la esclavitud. Tiene que cambiar su manera de conducirse
[68]
y dejarse guiar por el consejo de la experiencia y, por medio de la
sabiduría de las personas que se dejan enseñar por Dios, colocar su
voluntad del lado de la voluntad divina.
Una mancha en el alma
—Si Ud. está determinada a no atender
los consejos de otros sino a escucharse a Ud. misma, y trata de
solucionar sola sus problemas, puede estar segura de que segará
lo que sembró. Perderá del todo la buena senda, o bien se tornará
al Señor herida, magullada, humillada y penitente, confesando sus
errores. Terminará cansada de golpear al aire.
¿Está segura de que su proceder es correcto? Yo estoy segura de
que no lo es; pero el orgullo ha tomado posesión de su alma. Ud.
es demasiado inconstante y descuidada como para aceptar consejo.
Recuerde que cada acción y cada decisión que se toma puede tener
una de dos características: virtuosa o desmoralizadora. Su conducta