Los lectores comprenderán que habiendo fallecido en 1915, Ele-
na G. de White escribió en un período durante el cual no existían las
condiciones de vida que ahora nos rodean. Por ejemplo, la relación
entre el uso del alcohol y los accidentes automovilísticos no se recal-
ca como se lo haría hoy por la sencilla razón de que los automóviles
no eran entonces de uso común. Sin embargo, el lector encontrará
que se hace resaltar, en diversas declaraciones acerca del uso del
alcohol y los accidentes relacionados con él, la relación de causa a
efecto que mantienen. El poder del alcohol para socavar el hogar,
arruinar la salud, destruir la moral y perder el alma es tan grande
ahora como lo era hace medio siglo.
El lector percibirá rápidamente el significado de la temperancia
según fuera presentada a la Sra. White a lo largo de sus muchos años
de rico ministerio. En este sentido, el presente volumen constituye
una inestimable contribución a la literatura sobre temperancia. Los
sermones sobre ese tema que se hallan en el Apéndice ejemplifican
el profundo interés de la Sra. de White en salvar a la humanidad de
la maldición destructora de almas que es la intemperancia.
Que la presente obra pueda, con la bendición de Dios, revitali-
zar el interés de los adventistas en la temperancia y en la obra de
difundirla y nos ponga en el lugar que el Cielo nos ha asignado en
el mismo frente de las fuerzas de la temperancia, es el sincero deseo
de los editores.
Los Fideicomisarios de las Publicaciones de
Elena G. de White
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