El fanatismo
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firmemente su comportamiento descortés.—
The Review and Herald,
1 de septiembre de 1885
;
Nuestra Elavada Vocacion, 231
.
Elena G. de White enfrentó todas las fases del fanatismo
En 1844 tuvimos que enfrentar el fanatismo por todas partes,
pero siempre se me dio el consejo: Una gran ola de sensacionalismo
es un daño para la obra. Mantengan los pies en las pisadas de Cristo.
Se me dio un mensaje para enfrentar cada fase del fanatismo. Se me
instruyó que debía mostrar al pueblo que bajo una ola de emoción se
hacía una obra extraña. Hay quienes aprovechan la oportunidad para
introducir supersticiones. Así se cierra la puerta a la promulgación
de una sana doctrina.—
Carta 17, 1902
.
Un peligro inminente
A medida que se acerque el fin, el enemigo obrará con todo su
poder para producir fanatismo entre nosotros. Él se regocijaría de
ver a los adventistas del séptimo día ir a extremos que dieran la opor-
tunidad de que el mundo los señalara como un grupo de fanáticos.
He sido invitada a poner a nuestros ministros y miembros laicos en
guardia contra este peligro. Nuestra obra consiste en enseñar a hom-
bres y mujeres a edificar sobre un fundamento verdadero, a asentar
sus pies sobre un claro “así dice Jehová”.—
Obreros Evangélicos,
331
.
El control de la mente es una forma de fanatismo
He hablado con claridad con respecto a la peligrosa ciencia que
dice que una persona debe entregar su mente al control de otra. Esta
ciencia es del diablo.
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Esta es la clase de fanatismo que tuvimos que enfrentar en 1845.
No sabía entonces qué significaba, pero se me pidió que presentara
un testimonio firme y decidido contra cualquier cosa de esa clase.—
Carta 130, 1901
, (1 de febrero de 1901).