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Tabla de Contenidos
Información sobre este libro | 5 |
Prefacio | 33 |
Sección 1—El estudio de la mente | 37 |
Capítulo 1—Su importancia | 38 |
La obra más delicada | 38 |
Conocer las leyes que rigen la mente y el cuerpo | 38 |
Educar y disciplinar la mente | 38 |
El potencial de la mente disciplinada | 38 |
Trabajar con las mentes es la mayor de las obras | 39 |
La utilidad del maestro depende de la disciplina de su mente | 39 |
Se esforzará por alcanzar la excelencia mental y moral | 39 |
Prepara para la eternidad | 40 |
La ciencia del cristianismo y la mente | 40 |
Progreso por medio del conflicto | 41 |
Es deber de todo cristiano desarrollar la mente | 41 |
Educar todas las facultades de la mente y del cuerpo | 42 |
La mente cultivada es la medida del ser humano | 42 |
Adquirir conocimiento y cultura mental | 42 |
Es necesario comprender la mente al tratar a los enfermos | 43 |
Comprender las mentes y la naturaleza humana ayuda en la obra de la salvación | 43 |
Las facultades cultivadas aumentarán la demanda de nuestros servicios | 43 |
Podemos alcanzar casi la excelencia de los ángeles | 44 |
Capítulo 2—El cristiano y la psicología | 45 |
Las leyes de la mente fueron ordenadas por Dios | 45 |
Los verdaderos principios de la psicología se encuentran en las escrituras | 45 |
La mente dedicada a Dios se desarrolla armoniosamente | 45 |
La ciencia de una vida cristiana pura | 46 |
Rodeados por una atmósfera de paz | 46 |
La religión de Cristo es un remedio efectivo | 46 |
Entramos en la región de la paz | 47 |
Toda ansiedad indebida desaparecerá | 47 |
Educar el alma mediante la disciplina | 47 |
Cristo tiene poder para fortalecer y restaurar | 48 |
Dios o Satanás controlan | 48 |
Todo pecado acariciado debilita el carácter | 48 |
Las cualidades psicológicas del maestro | 49 |
El ser humano ha de llegar a ser una nueva criatura | 49 |
Lo bueno excluye lo malo | 50 |
Solo un día es mío | 50 |
Cómo pueden desarrollarse mentes bien equilibradas | 50 |
El conocimiento y la ciencia deben ser fortalecidos por el Espíritu Santo | 51 |
El manantial de la vida | 51 |
Los frutos de espíritu no se desarrollan en un momento | 52 |
Capítulo 3—Peligros de la psicología | 53 |
Satanás estudia la mente | 53 |
Satanás, maestro de artes sutiles | 53 |
Él viene disfrazado | 53 |
Mal uso de las ciencias relativas a la mente | 53 |
La obra de Satanás es desviar la mente del ser humano | 55 |
La artera insinuación en lugar del ataque abierto y osado | 55 |
Su objetivo especial son las mentes de los jóvenes | 56 |
Satanás controla la mente que no es guiada por el Espíritu Santo | 56 |
Desde los días de Adán hasta ahora | 57 |
Trabaja para confundir la mente de los que conocen la verdad | 57 |
Satanás desvía las mentes con temas de controversia | 57 |
Una mente domina a otra | 57 |
Un poder para el bien, un poder para el mal | 57 |
No confiar en el juicio de nadie | 58 |
Satanás busca mentes distraídas | 58 |
Los ángeles malos intentan destruir la voluntad humana | 58 |
La única seguridad es resistir | 58 |
Evitar los actos de presunción | 59 |
La fe genuina y la presunción | 59 |
Los ángeles malos o los ángeles de Dios controlan nuestra mente | 60 |
Solo si cedemos | 60 |
Se necesita una percepción clara | 60 |
La oración prevalecerá contra Satanás | 61 |
Capítulo 4—Las influencias espirituales y la mente | 62 |
Religión y salud | 62 |
La religión pura da serenidad, restauración y fortaleza | 62 |
Dios es la fuente de vida y gozo | 62 |
Todos reciben la vida de Dios | 63 |
Satanás usa la influencia de la mente sobre la mente | 63 |
Satanás emplea sus poderes para fines egoístas | 63 |
La transgresión no trajo un nuevo orden de energía y pasiones | 64 |
Todo ser humano debe elegir uno de los dos estandartes | 64 |
El pecado afecta a todo el ser | 64 |
La cruz da el nivel correcto a la mente humana | 64 |
El ser humano está completo en Cristo | 65 |
Solo Dios puede elevar el valor moral de cada ser humano | 65 |
El egoísmo y su fruto | 65 |
Se puede obtener la victoria | 65 |
La mente vacilante es el comienzo de la tentación | 66 |
Nadie necesita desesperar por tendencias heredadas | 66 |
Participantes del pecado por asociación | 67 |
La obra de Satanás es desanimar; la de Cristo, inspirar esperanza | 67 |
Un remedio para toda clase de tentación | 67 |
La sangre de Cristo es el único remedio | 68 |
Afrontemos el desafío del tentador | 68 |
Dirijamos nuestra atención a la obra de Dios | 68 |
Qué hace la religión | 69 |
Aumenta las facultades intelectuales | 69 |
Mejora la salud física | 69 |
Hacer el bien es la mejor medicina | 69 |
El amor de Jesús llena el alma con una atmósfera fragante | 70 |
Resultados de un momento de irreflexión | 70 |
Dios no hace milagros para impedir la cosecha | 70 |
Moldear las circunstancias que nos rodean en vez de ser moldeados por ellas | 71 |
Dios desea que la mente se renueve | 71 |
Tratar juiciosamente con las diferentes mentes | 72 |
Principios inflexibles identifican a los discípulos de Jesús | 72 |
Capítulo 5—El fanatismo | 73 |
Fanatismo en creyentes e incrédulos | 73 |
Cómo lo hace Satanás | 73 |
Resultado de acariciar tendencias defectuosas | 73 |
Privados de una actitud mental saludable | 74 |
Humildad espuria | 74 |
Reuniones provechosas | 74 |
Ritos extraños | 75 |
Naturalmente combativos | 75 |
Muchos confían en su propia justicia | 76 |
La reacción de un fanático | 76 |
Cómo enfrentar a un fanático | 76 |
Cuiden las expresiones y las actitudes | 76 |
Eviten criterios de invención humana | 77 |
Cuidado con luz “nueva” | 77 |
El fanatismo es difícil de apagar | 78 |
Teorías finamente hiladas que ocupan la mente | 78 |
Apártese del lado negativo (consejo a un pastor) | 79 |
La fe se sobrepone al pesimismo | 79 |
El peligro de la independencia individual | 80 |
La paz solo se encuentra en abrigar la mansedumbre | 80 |
La virtud de la cortesía cristiana | 80 |
Elena G. de White enfrentó todas las fases del fanatismo | 81 |
Un peligro inminente | 81 |
El control de la mente es una forma de fanatismo | 81 |
Abrigue una perspectiva imparcial y optimista | 82 |
Capítulo 6—Una saludable normalidad | 83 |
La fuente de la verdadera felicidad | 83 |
Celo que rápidamente se enfría | 83 |
Ni la fría ortodoxia ni el liberalismo descuidado | 84 |
Se necesitan mentes bien equilibradas | 84 |
Todas las facultades han de ser cultivadas | 84 |
Usar todas las facultades mentales | 85 |
Los medios para mejorar están al alcance de todos | 85 |
Cuerpo, mente y corazón bajo control divino | 86 |
Las facultades de la mente han de gobernar el cuerpo | 86 |
Mentes bien desarrolladas y amplitud de carácter | 86 |
Asuntos triviales y comunes empequeñecen la mente | 87 |
Las mentes no deben ser saturadas con cosas inútiles | 87 |
Establecer reglas de hierro para los demás deshonra a Dios | 88 |
Se necesita el equilibrio de distintas mentalidades | 88 |
El hisopo, el cedro y la palmera | 89 |
Los caracteres son tan variados como las flores | 89 |
Las facultades de la mente y del cuerpo son dones de Dios | 89 |
Dios desea caracteres bien equilibrados | 90 |
Sección 2—Relaciones básicas | 91 |
Capítulo 7—Enfermedades que se originan en la mente | 92 |
Se piensa muy poco en los factores causales | 92 |
Nueve de cada diez enfermedades se originan en la mente | 92 |
La mente afecta al cuerpo | 92 |
Un cerebro sano y bien alimentado | 93 |
Imaginación enfermiza | 93 |
La energía eléctrica del cerebro vitaliza el sistema | 93 |
Algunos están enfermos por falta de voluntad | 94 |
Importancia de una mente sana en un cuerpo sano | 94 |
Evitar la presión mental en los niños | 94 |
El egocentrismo provoca enfermedades | 95 |
Las emociones depresivas perjudican la salud | 95 |
Al tratar a los enfermos, estudie las mentes | 96 |
La enfermedad se origina en la mente | 96 |
Cristo sana | 96 |
La atmósfera proporciona salud y vigor | 96 |
Capítulo 8—La religión y la mente | 98 |
El amor de Cristo infunde vida al ser | 98 |
La obra de Cristo es sanar a los quebrantados de corazón | 98 |
La receta del salvador para los males mentales y espirituales | 98 |
El evangelio frente a la ciencia y la literatura | 99 |
Solo el evangelio puede curar los males que maldicen a la sociedad | 99 |
Solo mediante el desarrollo armonioso puede alcanzarse la perfección | 100 |
La levadura divina transforma la mente | 100 |
La verdad del evangelio proporciona un propósito firme | 100 |
Consagrarnos a Cristo produce paz | 101 |
Espaciarse en Cristo provee estímulo | 101 |
El conocimiento fortalece la mente y el alma | 101 |
La mente y la lucha espiritual | 102 |
Mantener la mente ocupada es una salvaguardia contra el mal | 102 |
Una imaginación pervertida provoca oscuridad | 102 |
Dirija la mente al creador, y no a la exaltación propia | 103 |
Aguas vivas en lugar de cisternas rotas | 103 |
Se necesita la unión de lo divino con la iniciativa humana | 104 |
Capítulo 9—La mente, la ciudadela | 105 |
La capital del cuerpo | 105 |
El cerebro controla el cuerpo | 105 |
Satanás ataca las facultades de percepción | 105 |
La tiranía de la costumbre | 106 |
Vigilemos la ciudadela | 106 |
La mente bien educada no vacila | 106 |
La ciudadela no protegida | 107 |
Manantial de vida o muerte | 107 |
El ocio, la complacencia propia y la seguridad: traidores dentro de los muros | 108 |
El tabaco es un veneno lento | 108 |
Esclavos del alcohol y de las drogas | 109 |
Las armas de Satanás | 109 |
El factor decisivo de la pasión y el apetito | 109 |
Lo que podría haber sido | 110 |
Elegir el control de la mente o del cuerpo | 110 |
Enseñar a la gente | 110 |
Capítulo 10—Comprensión | 111 |
Una obra que exige discernimiento y discriminación | 111 |
Una tarea agotadora | 111 |
El médico está asociado a toda clase de mentes | 112 |
Se necesitan paciencia y sabiduría | 112 |
El amor de Cristo se abre paso | 112 |
Con compasión y amor | 113 |
Una persona apasionada no debe tratar con las mentes | 113 |
Cualidades necesarias para comprender las mentes (consejos a un colportor) | 113 |
Enfrentar los impulsos, la impaciencia, el orgullo y la estima propia | 114 |
Se necesitan paciencia, tacto y sabiduría | 114 |
Una conducta que puede dejar cicatrices y heridas irreparables | 114 |
Se requiere el discernimiento más sutil | 115 |
La relación personal es esencial | 115 |
El exceso de trabajo incapacita para tratar con otros | 116 |
Comprender las diferentes necesidades | 116 |
No debe decirse la verdad en todo momento | 117 |
Cristo comprende | 117 |
Una relación más íntima con Cristo | 117 |
Cristo pide ternura y compasión | 118 |
La suma de la felicidad de la vida | 118 |
Sección 3—El desarrollo de la mente | 121 |
Capítulo 11—El estudio de la Biblia y la mente | 122 |
Fundamento de todo estudio | 122 |
Fortaleza de principios | 122 |
La única guía verdadera | 122 |
Se define la educación superior | 123 |
Inspira la mente | 123 |
Revela el propósito de la vida | 123 |
Las parábolas han de impresionar y despertar las mentes | 124 |
La Biblia no tiene rival | 124 |
Aceptarla con fe sencilla | 124 |
No estudie nada que arroje dudas a la palabra de Dios | 125 |
Las escrituras reconocen la libertad de elección moral de los seres humanos | 125 |
La mente encuentra su desarrollo más noble | 125 |
Busquen sus tesoros escondidos | 126 |
La Biblia dirige la vida rectamente | 126 |
Revela las reglas para una vida santa | 127 |
Un corazón nuevo significa una mente nueva | 128 |
No ha de leerse con indiferencia | 128 |
Educar la memoria ayuda la mente | 128 |
El estudio de la Biblia favorece el equilibrio mental | 129 |
Un antídoto para las insinuaciones ponzoñosas | 129 |
Protege de la superstición | 129 |
Mejora las facultades de razonamiento | 130 |
Dota de vigor a las facultades | 130 |
El estudio de la Biblia ensancha la mente | 131 |
La Biblia es una revelación de Jehová | 131 |
Capítulo 12—Diligencia | 132 |
Esfuérzate y lo alcanzará | 132 |
Alcanzar la máxima capacidad posible | 132 |
Las bellas cualidades mentales no son resultado de un accidente | 132 |
Necesitamos cultivar la mente | 133 |
La ley de la mente | 133 |
Poner los poderes latentes en acción | 134 |
Muchos podrían ser gigantes intelectuales | 134 |
Es necesaria la autodisciplina | 134 |
Los ángeles toman posesión de las mentes | 135 |
Se exige la más alta y santificada ambición | 135 |
Obren con la personalidad que Dios les ha dado | 135 |
El destructor del mundo (amonestación a un pastor a quien le gustaba la especulación) | 136 |
Avance constantemente | 136 |
Desarrolle todas sus facultades | 137 |
Oportunidades al alcance de todos | 137 |
El enemigo no puede estorbar el progreso diario | 137 |
Aférrense de Dios y avancen | 138 |
El elevado ideal de Dios para sus hijos | 138 |
Capítulo 13—Alimento para la mente | 140 |
Hay que aprovechar los talentos | 140 |
Alimento saludable para la mente | 140 |
Guardar las avenidas del alma | 140 |
La Biblia es el más interesante de los libros | 141 |
Libros que confunden la mente | 141 |
Entendimiento confundido | 142 |
Poder despótico de autores incrédulos (palabras del ángel instructor) | 142 |
Talentos corrrompidos | 142 |
Libros que debilitan la mente | 143 |
La ficción y los pensamientos sensuales | 143 |
La mente se hundirá en la imbecilidad (palabras de advertencia a una ama de casa discapacitada) | 144 |
Ebrios mentales | 144 |
La complacencia excesiva es pecado | 145 |
Recargar la mente | 145 |
Hablemos palabras que tiendan a la edificación | 145 |
Una mujer que pervirtió su corazón | 146 |
Sonidos, espectáculos e influencias que desmoralizan | 146 |
Algunas asociaciones son como un veneno insidioso | 146 |
Los ojos fijos en Cristo | 147 |
Capítulo 14—El ejercicio | 148 |
La ley de la acción obediente | 148 |
La máquina del cuerpo debe continuar su obra | 148 |
Ejercicio al aire libre | 149 |
La inactividad es causa de enfermedades | 149 |
La regulación juiciosa del ejercicio | 149 |
Impide que la mente trabaje en exceso | 150 |
Sin ejercicio la mente no puede funcionar bien | 150 |
El esfuerzo mental se restringe cuando se descuida el ejercicio físico | 150 |
Empléense por igual las facultades físicas y mentales | 151 |
El ejercicio es un agente curativo | 151 |
No hacer nada es peligroso | 151 |
La inactividad es la mayor maldición para muchos discapacitados | 152 |
El ejercicio debe ser sistemático (consejo a una madre discapacitada) | 152 |
La corrupción de este tiempo es resultado del abuso de cuerpos y mentes | 153 |
El esfuerzo de la mente y del cuerpo tienden a prevenir pensamientos impuros | 153 |
Cada día realice trabajo manual | 153 |
Todos los estudiantes tienen que hacer ejercicio | 154 |
El ejercicio físico da vida | 154 |
Capítulo 15—Factores emocionales | 156 |
La obediencia a Dios libera de la pasión y el impulso | 156 |
Las emociones han de ser controladas por la voluntad | 156 |
Las emociones controladas por la razón y la conciencia | 156 |
Hacer la voluntad de Dios sin dejarse llevar por los sentimientos y emociones (consejos a un joven) | 157 |
Jesús está a su lado (seguridad para un indeciso) | 157 |
Control de las emociones internas | 158 |
Las emociones son tan cambiantes como las nubes | 158 |
Las emociones no son una salvaguardia segura | 159 |
Los cristianos no debieran estar sujetos a las emociones | 159 |
Cristo da dominio sobre las inclinaciones naturales | 159 |
El arrebato de los sentimientos no es evidencia de conversión | 160 |
El sentimiento de intranquilidad puede resultar positivo | 160 |
El señor desea sacudir las mentes | 160 |
No hemos de absorbernos en el estudio de nuestras emociones | 161 |
Sección 4—La personalidad en desarrollo | 163 |
Capítulo 16—Influencias prenatales | 164 |
La importancia de las influencias prenatales | 164 |
Un espíritu satisfecho afecta a la descendencia | 164 |
Los sentimientos de la madre moldean la inclinación del niño que no ha nacido | 164 |
La influencia prenatal de la paz | 165 |
El padre debe conocer las leyes físicas | 165 |
Se priva a los niños de la adaptabilidad mental | 165 |
No deben descuidarse las necesidades de la madre | 166 |
La responsabilidad de la esposa | 166 |
Los hijos inocentes sufrirán | 166 |
La madre embarazada ha de formar hábitos de abnegación | 167 |
La base de un carácter correcto | 167 |
La raza gime bajo el peso de las miserias acumuladas | 167 |
Los deseos pecaminosos se trasmiten a los hijos | 167 |
La vida prenatal de Sansón regulada por Dios | 168 |
El padre y la madre están involucrados | 168 |
Los padres dan su propio sello a los hijos | 169 |
Satanás procura degradar las mentes | 169 |
La razón debiera controlar el número de hijos | 169 |
Transmiten energía disminuida | 170 |
La enfermedad pasa de una generación a otra | 170 |
La diferencia de edades es un factor | 170 |
Dios nos tendrá por responsables por el descuido prenatal | 171 |
Los padres preparan al niño para la vida | 171 |
Moldean la sociedad del futuro | 171 |
Los padres han dado su propio sello de carácter a sus hijos | 172 |
La responsabilidad de los padres por la influencia prenatal | 172 |
Qué hacer con ella | 173 |
Un día de ajuste de cuentas para los padres | 173 |
Se necesita sabiduría más que humana | 173 |
Dichosos los padres cuyas vidas reflejan la divina | 174 |
Capítulo 17—Herencia y ambiente | 175 |
El poder de la herencia | 175 |
Los niños a menudo heredan las tendencias de los padres | 175 |
Las madres debieran informarse en cuanto a las leyes de la herencia | 175 |
La enfermedad es trasmitida de padres a hijos | 175 |
Los niños han de evitar los malos hábitos de sus padres | 176 |
Los pecados de los antepasados llenaron el mundo de enfermedades | 176 |
Herencia del apetito por los estimulantes | 177 |
Los males del tabaco trasmitidos a los hijos | 177 |
Los niños heredan las inclinaciones | 177 |
Palabras de alabanza apropiadas | 178 |
El temperamento irritable a veces se hereda | 178 |
Satanás se aprovecha de las debilidades heredadas | 178 |
La conversión cambia las tendencias heredadas | 178 |
No han de ser esclavizados por la herencia | 179 |
Los ángeles ayudan a luchar contra estas tendencias | 179 |
La fe purifica las imperfecciones heredadas | 179 |
Los efectos de largo alcance del ambiente | 179 |
Las hijas de Lot arruinadas por el ambiente | 180 |
Evitemos las malas compañías | 180 |
Vivir en la atmósfera del cielo | 181 |
La influencia sobre la niñez modela el destino | 181 |
Los padres son responsables en gran medida | 181 |
Comenzar en la infancia | 182 |
La importancia de los tres primeros años de la vida | 182 |
Los primeros siete años tienen mucho que ver con la formación del carácter | 182 |
Rara vez se olvidan las primeras lecciones | 182 |
Primero el desarrollo físico | 183 |
El primer hijo necesita cuidado especial | 183 |
Ambientes diferentes para diferentes niños | 183 |
Los hábitos rara vez se cambian más tarde | 184 |
Influencia sanadora de la bondad | 184 |
Capítulo 18—La seguridad en el hogar | 185 |
El amor humano debe fundarse en el amor divino | 185 |
Alcanzar el ideal de Dios | 185 |
Pesar cada sentimiento al considerar el matrimonio | 185 |
La unión verdadera es la obra de años | 186 |
Desaparece la imagen romántica | 186 |
El amor estimula hacia fines más nobles | 186 |
La individualidad no se debe fusionar | 187 |
Entera sumisión únicamente a Jesús | 187 |
No debe albergarse el pensamiento que la unión es un error | 187 |
Una relación controlada por la razón | 188 |
Una familia bien organizada | 188 |
Los padres deben gobernarse a sí mismos | 188 |
Sonrisas y palabras tiernas para la familia | 189 |
Debe evitarse el lenguaje vulgar | 189 |
Nunca manifieste rudeza o falta de bondad | 190 |
Los amigos no deben inmiscuirse en la vida familiar (consejo a un joven) | 190 |
Las esposas anhelan palabras de amor | 190 |
El esposo puede cerrar la puerta a la enfermedad | 191 |
El esposo, cabeza de la familia | 191 |
La esposa, ayuda idónea para el esposo | 192 |
Cómo crear la paz en el círculo del hogar | 192 |
El esposo no ha de hacer alarde de su posición | 193 |
La esposa ayudará al esposo a mantener su dignidad | 193 |
Los seres humanos somos sociales | 194 |
La armonía en el hogar solamente es posible por el espíritu de Dios | 194 |
El círculo interior es supremo | 194 |
Capítulo 19—La influencia de los padres | 196 |
Controlados por principios divinos | 196 |
Los padres necesitan comprender a los hijos | 196 |
Dios ha señalado un camino | 196 |
El desasosiego debe ser reprimido | 197 |
Las mentes paralizadas de los padres | 198 |
La alimentación y la influencia de los padres | 198 |
El esposo, el que une el hogar | 199 |
Las madres no han de buscar la emoción del mundo | 199 |
La madre que amamanta ha de mantenerse feliz | 200 |
La madre debiera tratar de mantenerse dueña de sí misma | 200 |
No herir con la indiferencia a los niños sensibles | 200 |
Traten con ternura a los pequeños | 201 |
Su hijo es propiedad de Dios | 201 |
Disposiciones y genios alegres | 202 |
Las madres son un ejemplo | 202 |
Cuando el capricho del niño es ley | 202 |
Satanás procura controlar la mente de los niños | 202 |
Los padres han de ligar a sus hijos a su corazón | 203 |
Disciplina concreta y uniforme | 203 |
Jesús manifestó una aptitud especialmente amable | 204 |
La mente ocupada no deja lugar para pensamientos degradantes | 204 |
Rodeados por un muro indestructible | 204 |
Capítulo 20—La atmósfera del hogar | 206 |
El hogar impacta a la sociedad | 206 |
Agencia efectiva para la formación del carácter | 206 |
El culto en la casa | 206 |
Mayor influencia cuando hay mayor unidad | 206 |
Autoridad con firmeza | 207 |
El hogar, una lección objetiva | 207 |
El principio de la paz | 207 |
El amor se revela en los actos | 208 |
El cristianismo en el hogar brilla en todas partes | 208 |
La elevación de la humanidad comienza en el hogar | 208 |
Qué hace que el hogar sea atractivo | 209 |
La pureza en el hogar | 209 |
La ubicación del hogar | 209 |
Muebles finos no hacen el hogar | 210 |
Las críticas abren la puerta a Satanás | 210 |
La influencia de los defectos de los padres | 211 |
Los hogares con discordia no atraen a los ángeles | 211 |
Un llamamiento a la hospitalidad | 211 |
Actitudes que propician la felicidad | 212 |
El cultivo del verdadero refinamiento | 212 |
Capítulo 21—Cristo trata con las mentes | 213 |
Las enseñanzas de Cristo son una guía | 213 |
Se identificó con los intereses de sus oyentes | 213 |
Conoce lo más recóndito de la mente humana | 213 |
Actúa mediante la tranquila y constante acción de leyes | 213 |
Siempre rodeado de paz | 214 |
Su vida era armoniosa | 214 |
No carecía de calor y alegría | 215 |
Posibilidades infinitas en cada ser humano | 215 |
Su corazón era un manantial de vida | 215 |
Cristo nunca fue apasionado | 216 |
Tacto para tratar con mentes prejuiciadas | 216 |
Llegó hasta las profundidades de la miseria humana | 216 |
Combate el poder de Satanás sobre la mente | 216 |
Ayuda a ejercer fe | 217 |
El conocimiento divino puede llegar a ser nuestro | 217 |
En contacto con mentes diferentes | 218 |
La mente ha de llegar a ser una con la de Cristo | 218 |
Capítulo 22—La escuela y el maestro | 219 |
Despertar las facultades mentales | 219 |
La educación imparte energía vitalizadora | 219 |
El más elevado desarrollo de las facultades mentales | 219 |
Peligros de algunas escuelas | 220 |
Amparar la educación | 220 |
Nuestra relación con Dios | 220 |
La mejor educación | 221 |
Influencia de los hábitos de los maestros | 221 |
Desarrollar las cualidades superiores de la mente | 221 |
Ser inspirados por el Espíritu Santo | 222 |
Enfrentar las faltas | 222 |
Plenamente capacitado para tratar con las mentes humanas | 222 |
Responsabilidades que no son para los inexpertos | 223 |
Consejo a un maestro de genio exaltado | 223 |
Necesitan una mente bien equilibrada | 224 |
La decisión de mejorar es importante | 224 |
No se usa ni la mitad de las facultades mentales | 224 |
Combinar lo natural con lo espiritual y procurar las más elevadas realizaciones | 225 |
Las lecciones correctas no pueden impresionar las mentes de quienes no conocen la verdad de la palabra de Dios | 226 |
Uso de mejores métodos | 226 |
Eviten una variedad demasiado grande de alimento mental | 226 |
El estudio y la vida práctica | 227 |
Necesidad de educación práctica | 227 |
Libros de texto y modelos de pensamiento | 227 |
Apoderarse de las verdades de la Biblia | 228 |
Uso adecuado del cuerpo | 228 |
Los maestros cooperan en la recreación | 229 |
Muestre que confía en los alumnos | 229 |
Es esencial la confianza de los alumnos | 230 |
Ayudar a los atrasados y a los no promisorios | 230 |
Cómo tratar con el estudiante lento | 230 |
La atmósfera del aula afecta a los estudiantes | 231 |
Se necesitan paciencia y adaptabilidad (consejos a un maestro) | 231 |
Los padres han de cooperar con los maestros | 232 |
La responsabilidad de la comunidad religiosa | 232 |
Cómo enfrentar corazones obstinados y actitudes perversas | 232 |
Sección 5—La fuerza reconfortante de la vida | 235 |
Capítulo 23—El amor, un principio divino y eterno | 236 |
El amor, el principio de acción | 236 |
Es diferente de cualquier otro principio | 236 |
Es una planta delicada que debe ser cultivada y apreciada | 236 |
El sustituto de Satanás: egoísmo en lugar del amor | 236 |
El amor brota espontáneamente cuando el yo se oculta | 237 |
El amor no es un impulso sino un principio divino | 237 |
El amor, una fuerza intelectual y moral | 237 |
El amor, una atmósfera fragante | 238 |
Desarraiga el egoísmo y las luchas | 238 |
El fruto del amor puro | 238 |
El amor hace concesiones | 239 |
El amor gobierna los motivos y las acciones | 239 |
El amor interpreta favorablemente los motivos ajenos | 240 |
El amor suaviza la vida entera | 240 |
El verdadero amor es espiritual | 240 |
El amor vive de la acción | 241 |
Evidencias de un nuevo principio de vida | 241 |
Capítulo 24—El amor en el hogar | 242 |
Fuente del verdadero afecto humano | 242 |
El amor une los corazones | 242 |
El afecto puede ser puro, pero superficial | 242 |
El amor no puede existir sin expresión | 243 |
El amor es una planta que debe tratarse con ternura | 243 |
No refrenar el cariño y la ternura | 243 |
El amor no es pasión | 243 |
El verdadero amor prepara para el matrimonio de éxito | 244 |
El amor y la disciplina propia unen a la familia | 244 |
Características del amor verdadero (consejo a un esposo obstinado) | 245 |
El alma anhela un amor superior | 245 |
El amor encuentra expresión en palabras y hechos | 246 |
Los pequeños actos revelan el verdadero amor | 246 |
El poder del ejemplo de los padres | 247 |
El amor de Jesús reflejado en los padres | 247 |
El amor de la madre es una ilustración del amor de Cristo | 247 |
La influencia de un hogar cristiano nunca se olvida | 247 |
Capítulo 25—Amor y sexualidad en la experiencia humana | 249 |
Capítulo 26—Amor fraternal | 271 |
El amor por otros produce gozo | 271 |
El ejemplo de amor abnegado es irresistible | 271 |
El yo puede oscurecer el amor | 271 |
El amor produce humildad | 271 |
El verdadero amor es modesto | 272 |
El amor transforma el carácter | 272 |
Amor egoísta | 272 |
La capacidad no sustituye al amor | 273 |
La generosidad es una prueba de amor | 273 |
Dar amor genuino es un signo de discipulado | 273 |
Un corazón guiado por el amor | 274 |
Corrige las peculiaridades | 274 |
Solo el amor de Cristo puede sanar | 274 |
Prepara para toda eventualidad | 274 |
Nunca se obtiene la fraternidad por medio de componendas | 274 |
El amor divino es imparcial | 275 |
Abarca en un abrazo divino a la fraternidad humana | 275 |
Su amor por las almas mide su amor por Dios | 276 |
Amor perfecto en la iglesia es la meta de Cristo | 276 |
Capítulo 27—El amor de Dios | 278 |
Dios es amor | 278 |
El amor de Dios se manifiesta en la naturaleza | 278 |
Los mandamientos se basan en el principio del amor | 279 |
Jesús y la ley del amor | 279 |
La naturaleza sensible y amante de Cristo | 279 |
El amor de Dios es un manantial vivo | 280 |
El universo expresa el amor de Dios | 280 |
Satanás originó la idea de un Dios duro y severo | 280 |
El amor entre el padre y el hijo es un ejemplo para nosotros | 281 |
El amor de Cristo es un poder restaurador y sanador | 281 |
Recordemos el amor de Dios | 281 |
El amor constituye nuestro cielo | 282 |
El amor infinito e inagotable de Dios | 282 |
El amor de Dios es progresivo | 283 |
Sección 6—El egoísmo y el respeto propio | 285 |
Capítulo 28—La autoestima | 286 |
Desarrollar la autoestima | 286 |
Respeto por la dignidad del ser humano | 286 |
Mantener la autoestima | 286 |
La rectitud genera respeto propio | 287 |
El respeto propio debe ser firmemente apreciado | 287 |
El respeto propio es la medida del respeto por los demás | 287 |
Los hábitos erróneos socavan la autoestima de los alumnos | 287 |
Las palabras impacientes afectan la autoestima | 288 |
Los padres nunca han de perder el respeto propio por palabras descuidadas | 288 |
La masturbación destruye el respeto propio | 288 |
No destruya la autoestima ajena | 289 |
El sostenerse a sí mismo en lo económico aumenta el respeto propio | 289 |
Ser propietarios ayuda a los pobres a mejorar su autoestima | 289 |
El cultivo de sí mismo y de la dignidad | 290 |
Cuidado con la compasión propia | 290 |
Cristo restaura la autoestima | 290 |
Consejo a uno que había perdido la autoestima | 290 |
Cultive la autoestima | 291 |
Capítulo 29—Dependencia e independencia | 292 |
Capítulo 30—Egoísmo y egocentrismo | 302 |
Por naturaleza somos egocéntricos | 302 |
El egoísmo lleva al fracaso intelectual | 302 |
El egoísmo es la causa de la culpabilidad humana | 302 |
Confunde los sentidos | 302 |
Hable menos del yo (consejo a una persona dominante y dictatorial) | 303 |
Cuidado con la autocompasión | 303 |
Vivir para sí deshonra a Dios | 304 |
La complacencia del yo indica una necesidad espiritual | 304 |
Peligros de la adulación propia | 304 |
La influencia ruinosa de la exaltación propia sobre la mente | 305 |
Evitar los extremos de la confianza propia (consejos a un ejecutivo) | 305 |
El egocentrismo acarrea enfermedad (mensaje personal) | 306 |
El egocentrismo afecta la percepción (mensaje personal) | 306 |
Debe enseñarse la gracia del olvido de sí a cada niño | 306 |
La base de la verdadera grandeza es el olvido de sí mismo | 307 |
Oraciones paganas | 307 |
Jesús no reivindicaba sus derechos | 307 |
El remedio divino para el egoísmo y la exaltación propia | 308 |
Sección 7—La adolescencia y la juventud | 309 |
Capítulo 31—Problemas de los jóvenes | 310 |
Los jóvenes son receptivos y tienen esperanzas | 310 |
Los jóvenes deben elegir el destino de su vida | 310 |
La causa de la debilidad mental y moral | 310 |
Educar la mente para que gobierne la vida | 311 |
Muchos son incapaces de pensar por sí mismos | 311 |
Los resultados de dominar la mente por la fuerza o el temor | 312 |
La disciplina que estimula y fortalece | 312 |
La reacción a las reglas rigurosas | 313 |
Es difícil para los jóvenes llevar cargas | 313 |
Los pensamientos se convierten en hábitos | 313 |
Ejemplos tristes de la historia | 314 |
La influencia de la lectura | 314 |
La mente se iguala a las cosas que contempla | 315 |
El valor de la experiencia religiosa personal | 315 |
Los jóvenes necesitan la disciplina del trabajo | 316 |
La ociosidad es pecado | 316 |
No debe descuidarse la educación en los deberes domésticos | 316 |
Lo que toda mujer debería saber | 317 |
Mujeres que dejan de ejercitar la mente | 317 |
La forma de vestir de una mujer es un indicador de su mentalidad | 318 |
La necesidad de pureza de pensamiento y acción | 318 |
La masturbación debilita la mente | 319 |
Los jóvenes usarán su energía | 319 |
Los jóvenes necesitan actividad | 319 |
Responden a las sugerencias | 320 |
Algunas veces no ven a Dios como un padre amante | 320 |
La imaginación enfermiza distorsiona el carácter de Dios | 321 |
Necesidad de moderación | 321 |
Evitar el sentimentalismo | 321 |
Los jóvenes tienen necesidad de consejo | 322 |
Se espera el mayor desarrollo posible | 322 |
La mente siempre activa | 322 |
La juventud es el tiempo de oportunidad | 323 |
Capítulo 32—La pasión y el amor ciego | 324 |
Durante el noviazgo se necesita el sentido común | 324 |
Desarrollar los rasgos más nobles | 324 |
El afecto puro es más celestial que terrenal | 324 |
Los peligros de trasnochar | 325 |
La pasión es una base muy pobre para el matrimonio | 325 |
El amor falsificado es incontrolable | 325 |
El amor no santificado descarría | 326 |
La repetición del pecado debilita el poder para resistirlo | 326 |
La pasión lo destruye todo | 326 |
El amor ciego afecta todas las facultades | 327 |
Amor adolescente | 327 |
Noviazgos clandestinos | 328 |
No jugar con los corazones | 328 |
Hablan de los temas que pasan por su mente | 329 |
Por qué los jóvenes prefieren la compañía de los jóvenes | 329 |
Consejo a una señorita para que controle sus sentimientos | 329 |
Disciplínese a sí misma | 330 |
Vínculos equivocados pueden debilitar los poderes de la mente (consejo a una joven de dieciocho años) | 331 |
Los reglamentos del colegio | 331 |
La edad, las condiciones y la disposición mental | 331 |
Los peligros de la pasión | 332 |
Cuando el amor humano prevalece | 332 |
Casamientos mixtos | 333 |
El casamiento con incrédulos | 333 |
La definición de un incrédulo | 334 |
El terreno prohibido de los caprichos no santificados (consejo a un ministro) | 334 |
El amor libre | 335 |
El amor no es sentimentalismo | 335 |
Identificar la falsificación | 335 |
La elección de un compañero | 336 |
Capítulo 33—Peligros que enfrenta la juventud | 337 |
Los hábitos determinan el destino | 337 |
Autodisciplina y no complacencia propia | 337 |
Firmeza de carácter | 337 |
Peligro de descuidar la educación y la preparación especial | 338 |
Ser brillantes no es garantía de éxito | 338 |
No hay virtud en la ignorancia | 339 |
Dudar no es una virtud | 339 |
El poder destructor de la duda | 340 |
Dejar de poner en práctica el conocimiento | 340 |
Los males de la inacción física y el exceso de actividad mental | 341 |
Evitar cargas y trabajos (experiencia de dos jóvenes) | 341 |
Recreación o diversión | 342 |
Alegría sin sentido | 342 |
El baile moderno de moda | 342 |
Buscar satisfacción en los entretenimientos y placeres | 343 |
Pensamientos necios y conversación frívola | 343 |
El remolino de excitación | 344 |
Partidas de placer | 344 |
La frivolidad es un peligro | 344 |
La complacencia debilita la fuerza mental | 345 |
El placer indiscriminado empequeñece la mente | 345 |
Entretenimientos peligrosos | 345 |
La complacencia del apetito perjudica la salud del cuerpo y del alma | 346 |
Evitar las tentaciones | 346 |
La ambición que glorifica a Dios | 347 |
Capítulo 34—La conciencia | 348 |
Exaltar la conciencia a su legítimo lugar de autoridad | 348 |
Controle la conciencia y cultive una disposición afable | 348 |
Una conciencia pura es una adquisición maravillosa | 348 |
Ir en contra de la conciencia es un peligro terrible | 349 |
Satanás intenta ahogar la conciencia | 349 |
Un paso en falso cambia la vida | 349 |
La conciencia violada se debilita | 349 |
La conciencia violada no es confiable | 350 |
La pérdida de la integridad de conciencia paraliza las energías | 350 |
La conciencia violada llega a ser un tirano | 350 |
Satanás controla la conciencia adormecida por el alcohol | 350 |
La alimentación afecta la conciencia | 350 |
La salud y la conciencia | 351 |
La conciencia es un agente efectivo para restaurar la salud | 351 |
Es posible estar concienzudamente equivocados | 351 |
Las percepciones humanas son una guía insegura | 352 |
Cuándo podemos confiar en la conciencia | 352 |
La palabra de Dios es la norma | 353 |
¿Está su conciencia cambiando su vida? | 353 |
La influencia de la verdad sobre la conciencia y el corazón | 353 |
Si la verdad está únicamente en la conciencia turbará la mente | 354 |
Dios no fuerza la conciencia | 354 |
Cuándo la conciencia es una guía segura | 354 |
Las emociones y los deseos sujetos a la razón y a la conciencia | 354 |
Las cicatrices permanecen para siempre | 355 |
La gracia de Cristo es suficiente para una conciencia culpable | 355 |
Usted puede hacer de sí mismo lo que elija | 355 |
No entremeterse con las conciencias de los demás | 356 |
No es criterio para los demás | 356 |
Los padres han de ayudar a sus hijos a conservar una limpia conciencia | 356 |
La conciencia ha de ser purificada | 357 |
Una clara conciencia produce paz perfecta | 357 |
Sección 8—Principios guiadores en la educación | 359 |
Capítulo 35—La influencia de la percepción | 360 |
Una ley intelectual y espiritual | 360 |
Contemplar el mal corrompió a los antediluvianos | 360 |
Transformados para lo mejor | 360 |
Transformados para lo peor | 360 |
La vida cambia por la contemplación | 361 |
Percepción selectiva | 361 |
Mantener los poderes de la percepción alerta | 361 |
Los hábitos físicos controlados por la conciencia influyen sobre la percepción | 362 |
El ejercicio mejora la percepción | 362 |
Aumentando la perfección se aumenta la percepción | 362 |
El dolor debilitó la percepción de María | 363 |
Reconoció a Jesús por su voz | 363 |
El apetito disminuye la capacidad de percepción | 363 |
El pecado ofusca nuestras percepciones | 363 |
Las facultades de percepción se nublan | 364 |
Cómo enfrentó Cristo las percepciones nubladas por el pecado | 364 |
Las pasiones no controladas dañan las facultades de percepción | 365 |
Se puede educar la mente para aceptar el pecado | 365 |
Las facultades llegan a ser juguete del enemigo | 365 |
Consejo a alguien que imaginaba sufrir un mal inexistente | 366 |
No nos espaciemos en el poder de Satanás | 366 |
La influencia del ambiente | 367 |
El ambiente influye en la experiencia | 367 |
Qué pervierte el corazón | 368 |
Las percepciones se confunden al elegir las ventajas temporales | 368 |
Las percepciones oscurecidas para las realidades eternas | 368 |
Lo que aviva las percepciones | 369 |
Capítulo 36—Principios de motivación | 370 |
El éxito requiere una meta | 370 |
Apuntar tan alto como sea posible | 370 |
Los estudiantes han de tener una meta real | 370 |
Cristo estimula a tener ideales elevados | 370 |
Dejar de alcanzar el potencial de uno | 371 |
Grandes posibilidades en la vida | 371 |
“Algo mejor”, la ley de la verdadera vida | 371 |
Desarrollar las motivaciones más elevadas para progresar | 372 |
La falta de metas del hombre insensato | 372 |
Una vida sin metas es morir en vida | 372 |
Los hongos se arraigan en la falta de metas | 372 |
La falta de metas predispone a la intemperancia | 373 |
Pocos males deben ser más temidos | 373 |
Nadie ha de vivir sin metas | 373 |
Deben cultivarse los motivos correctos | 374 |
Los actos revelan las motivaciones | 374 |
Se juzgarán los motivos, no las apariencias | 374 |
Los seguidores de Cristo encuentran nuevas motivaciones | 375 |
Dos poderes motivadores opuestos | 375 |
Todo acto tiene un carácter doble | 376 |
Los actos derivan su valor de los motivos | 376 |
Los motivos dan carácter a las acciones | 376 |
Dios revela los motivos | 377 |
Nuestros motivos secretos deciden el destino | 377 |
Dios estima a los seres humanos por la pureza de sus motivos | 377 |
Dios juzga por los motivos | 377 |
A veces es difícil discernir los motivos | 378 |
La verdadera conversión cambia los motivos | 378 |
Los grandes poderes motivadores | 378 |
Capítulo 37—Principios de estudio y aprendizaje | 380 |
La mente y los afectos deben ser educados | 380 |
Dios aprueba el más elevado cultivo de la mente | 380 |
No satisfechos con trabajo de calidad inferior | 381 |
Hay que elevar la mente | 381 |
La verdadera educación combina lo intelectual con lo moral | 382 |
La verdadera piedad eleva y refina | 382 |
La necesidad de entereza | 382 |
Las trivialidades debilitan la mente | 383 |
No descuidar los asuntos temporales | 383 |
La calidad de los hombres llamados a enseñar | 383 |
Los hábitos correctos dejan impresiones en el carácter | 384 |
Los caracteres no se forman en un mismo molde | 384 |
Debe ser como Cristo al tratar con las mentes | 385 |
La censura contínua confunde al niño | 386 |
Cuidado al suspender a los alumnos | 386 |
Evite crear sentimientos de injusticia | 387 |
La mente necesita alimento puro | 387 |
Libros escritos por incrédulos | 387 |
Los estudiantes aprenden a obedecer a Dios | 388 |
Capítulo 38—Equilibrio en la educación | 389 |
La educación tiene implicaciones eternas | 389 |
Restaurar la armonía en el ser | 389 |
Desarrollar todos los talentos | 389 |
La verdadera educación es abarcante | 390 |
El desarrollo simétrico para todos los deberes | 390 |
Todas las facultades han de alcanzar su máximo potencial | 390 |
El conocimiento de todas las ciencias es poder | 390 |
Los jóvenes han de ser pensadores | 391 |
La verdadera educación desarrolla el carácter | 391 |
El mayor valor es edificar el carácter | 392 |
Muchos no comprenden los verdaderos principios | 392 |
La educación no es solo la del cerebro | 393 |
Hay que ejercitar la mente y el cuerpo por igual | 393 |
Educar para honrar a Dios | 394 |
La necesidad de un desarrollo armonioso | 394 |
La ignorancia no aumenta la espiritualidad | 395 |
La educación requiere esfuerzos esmerados | 395 |
Establecer hitos bien definidos | 395 |
La importancia de la formación de hábitos correctos | 396 |
El sostenimiento propio es una parte importante de la educación | 396 |
La educación moldea la organización social | 397 |
La necesidad de enseñar agricultura | 397 |
La educación continúa toda la vida | 397 |
La verdadera ambición | 398 |
El conocimiento más esencial | 398 |
¿Qué “curso universitario” puede igualar a este? | 399 |
Es esencial impartir conocimiento | 399 |