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Mente, Carácter y Personalidad 1
tan íntima entre Jesús y sus discípulos que el cristiano se vuelve
más semejante a su Maestro en carácter. Tiene una visión más clara
y amplia. Su discernimiento es más penetrante, su criterio mejor
equilibrado. Queda tan avivado por el poder vivificador del Sol de
justicia, que es capacitado para llevar mucho fruto para gloria de
Dios.—
Obreros Evangélicos, 302, 303 (1915)
.
La ciencia de una vida cristiana pura
La ciencia de una vida cristiana pura, íntegra y consecuente
se obtiene mediante el estudio de la Palabra de Dios. Esta es la
más grande educación que cualquier ser terrenal puede obtener.
Estas son las lecciones que se deben enseñar a los estudiantes en
nuestras escuelas, para que puedan salir con pensamientos puros, y
mentes y corazones limpios, preparados para ascender la escalera
del progreso y practicar las virtudes cristianas. Por esto deseamos
que nuestras escuelas estén relacionadas con nuestros sanatorios, y
nuestros sanatorios con nuestras escuelas. Estas instituciones han
de ser dirigidas con la sencillez del evangelio que se presenta en el
Antiguo y en el Nuevo Testamento.—
Manuscrito 86, 1905
.
Rodeados por una atmósfera de paz
Todos los que están en la escuela de Dios necesitan de una
hora tranquila para la meditación, a solas consigo mismos, con la
naturaleza y con Dios [...]. Cada uno de nosotros ha de escuchar la
voz de Dios hablar a su corazón. Cuando toda voz ha sido silenciada,
y tranquilos en su presencia esperamos, el silencio del alma hace más
perceptible la voz de Dios. El nos dice: “Estad quietos, y conoced
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que yo soy Dios”.
Salmos 46:10
. En medio de la presurosa multitud
y de las intensas actividades de la vida, el que así se refrigera se verá
envuelto en un ambiente de luz y paz. Recibirá un nuevo caudal de
fuerza física y mental.—
El Ministerio de Curación, 37 (1905)
.
La religión de Cristo es un remedio efectivo
Satanás es el originador de la enfermedad, y el médico lucha
contra su obra y poder. Por todas partes prevalece las enfermedades
mentales [...]. Los incrédulos han sacado partido de estos casos