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Mente, Carácter y Personalidad 1
Las mentes paralizadas de los padres
Conocemos algo de la forma en que Satanás está trabajando y
cuánto éxito tiene. Por lo que se me ha mostrado, ha paralizado
la mente de los padres. Son lentos para sospechar que sus propios
hijos pueden estar equivocados y ser pecadores. Algunos de estos
hijos profesan ser cristianos, y los padres duermen, no temiendo
ningún peligro, mientras las mentes y los cuerpos de sus hijos se
están arruinando.
Algunos padres ni siquiera se preocupan por tener a sus hijos
consigo cuando están en la casa de Dios. Las jovencitas asisten a las
reuniones y se sientan, tal vez con sus padres, pero más frecuente-
mente en los asientos de atrás. Tienen el hábito de encontrar excusas
para salir de la iglesia. Los muchachos comprenden esto y salen
antes o después que salieron las niñas y entonces, al terminar la
reunión, las acompañan a la casa. Los padres no son más sabios
por esto. Por otra parte, dan excusas para volver caminando, y los
muchachos y las niñas se reúnen en un parque u otro lugar aislado, y
juegan y pasan un momento de emoción, sin que los vean ojos expe-
rimentados que puedan ayudarlos a andar con cautela.—
Testimonies
for the Church 2:481, 482 (1870)
.
La alimentación y la influencia de los padres
Si los padres hubieran vivido en forma saludable, si hubiesen es-
tado satisfechos con un régimen sencillo, habrían ahorrado muchos
gastos. El padre no habría estado obligado a trabajar más allá del
límite de sus fuerzas a fin de satisfacer las necesidades de su fami-
lia. Un régimen nutritivo y sencillo no habría influido para activar
indebidamente el sistema nervioso y las pasiones animales, produ-
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ciendo mal humor e irritabilidad. Si el niño consumiera únicamente
alimentos sencillos, tendría la cabeza despejada, los nervios firmes y
el estómago sano; y por tener un organismo en buenas condiciones,
no padecería de inapetencia; y con todo esto, la generación actual
estaría en una condición mucho mejor que la que tiene ahora. Pero
aun ahora, en este período tardío, es posible hacer algo para mejorar
nuestra condición. La temperancia en todas las cosas es necesaria.
Un padre temperante no se quejará si no tiene una gran variedad de