Página 539 - Testimonios para la Iglesia, Tomo 1 (2003)

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La reforma en el vestir
Respondiendo a preguntas de muchas hermanas respecto al largo
adecuado del vestido que recomienda la reforma, diría que en nuestra
parte del estado de Míchigan, hemos adoptado un largo uniforme de
modo que el borde quede a unas 9 pulgadas (alrededor de veintitrés
centímetros) del piso. Aprovecho esta oportunidad para responder
estas preguntas a fin de ahorrar el tiempo requerido para contestar
tantas cartas. Debí haber hablado antes, pero he esperado a ver si
publicaba algo definido sobre este punto en el
Health Reformer
(El
Reformador de la Salud). Recomendaría encarecidamente unifor-
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midad en el largo, y diría que 9 pulgadas desde el piso están muy
de acuerdo con mi punto de vista del asunto, hasta donde pueda
expresarlo en pulgadas.
Al viajar de lugar en lugar, encuentro que la reforma en el vestir
no está correctamente representada y se me hace sentir que algo más
definido debiera decirse para que pueda haber uniformidad de acción
al respecto. Este estilo de vestir no es popular, y por esta razón debe
optarse por nitidez y buen gusto por parte de las hermanas que lo
adopten. He hablado una vez sobre este punto; sin embargo, algunas
han fracasado por no seguir el consejo que se ha dado. Debe haber
uniformidad respecto al largo en el vestir entre las observadoras del
sábado. Las que deciden diferenciarse por adoptar este vestuario
no deben pensar ni siquiera por un momento, que no sea necesario
mostrar orden, gusto y nitidez. Antes de vestirse, nuestras hermanas
deberían obtener patrones de los pantalones y chaquetas que se usan
con esa clase de vestido. Causa mucho daño a la reforma en el vestir
el que personas introduzcan en una comunidad un estilo que en cada
detalle necesita alteración antes que pueda representar con derecho
la reforma en el vestir. Hermanas, esperen hasta que puedan vestirse
correctamente.
En algunos lugares hay fuerte oposición al vestido corto. Pero
cuando veo algunos vestidos que usan las hermanas, no me sorpren-
de que la gente esté disgustada y los condene. Dondequiera que se
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