Página 242 - Joyas de los Testimonios 2 (2004)

Basic HTML Version

238
Joyas de los Testimonios 2
del hombre, ¿cómo puede cualquiera que profese el nombre de
Cristo atreverse a tratar con indiferencia a uno de sus pequeñuelos?
¡Cuán cuidadosamente debieran los hermanos y las hermanas de
la iglesia velar sobre cada palabra y acción para no dañar al aceite
y al vino! ¡Con cuánta paciencia, bondad y afecto debieran tratar
lo adquirido por la sangre de Cristo! ¡Cuán fiel y fervorosamente
debieran trabajar para elevar a los abatidos y desalentados! ¡Cuán
tiernamente debieran tratar a los que procuran obedecer a la verdad
y, no hallando estímulo en casa, han de respirar constantemente una
atmósfera de incredulidad y tinieblas!
El trato con los que yerran
Si se cree que un hermano erró, sus hermanos y hermanas no
deben murmurarlo entre sí ni comentarlo en forma que magnifique
los supuestos errores y defectos. Esto es muy corriente, pero el
desagrado de Dios pesa sobre quienes lo hacen, y Satanás se regocija
porque puede debilitar y molestar a quienes podrían ser fuertes en el
Señor. El mundo ve su debilidad y juzga esta clase de personas y la
verdad que profesan amar por los frutos que se manifiestan en ellas.
“Jehová, ¿quién habitará en tu tabernáculo? ¿Quién residirá en
el monte de tu santidad? El que anda en integridad, y obra justicia, y
habla verdad en su corazón. El que no detrae con su lengua, ni hace
mal a su prójimo, ni contra su prójimo acoge oprobio alguno. Aquel
a cuyos ojos es menospreciado el vil; mas honra a los que temen a
Jehová: y habiendo jurado en daño suyo, no por eso muda. Quien su
dinero no dió a usura, ni contra el inocente tomó cohecho. El que
hace estas cosas, no resbalará para siempre.”
Salmos 15
. Según este
pasaje el detractor queda excluído de morar en el tabernáculo de
Dios y en la santa colina de Sión. El que admite oprobio contra su
[259]
prójimo no puede recibir la aprobación de Dios.
¿Cuántos ministros, mientras se hallan empeñados en una buena
obra que vuelve las almas hacia Dios y la verdad, son llamados
a presidir algún juicio de la iglesia entre hermanos que actúan en
forma completamente errónea y tienen un espíritu contencioso e
intolerante?
Esta manera de desviar a los hombres de su campo de labor se
ha repetido vez tras vez a medida que esta causa ha avanzado. Es