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La indolencia
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Felicidad en el cumplimiento de los deberes asignados
—La
verdadera felicidad se encuentra solamente al ser buenos y al hacer el
bien. El gozo más puro y elevado corona a los que cumplen fielmente
los deberes que les han sido encomendados.—
MeM 172 (1901)
.
La ociosidad puede conducir al desaliento
—El desaliento es
con frecuencia resultado de un ocio indebido. La ociosidad pro-
porciona tiempo para albergar pesares imaginarios. Muchos que no
tienen verdaderas dificultades ni contratiempos en el presente, con
seguridad los piden prestados del futuro. Si esas personas tratan de
aliviar las cargas de los demás, deberían olvidar las propias. Un tra-
bajo enérgico que invite a la acción, tanto de las facultades mentales
como de las físicas, es una bendición inestimable para la mente y el
cuerpo.—
The Signs of the Times, 15 de junio de 1882
.
El desarrollo del carácter
—Recordad que en cualquier puesto
en que sirváis, reveláis qué móvil os inspira y desarrolláis vuestro
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carácter. Cuanto hagáis, hacedlo con exactitud y diligencia; dominad
la inclinación a buscar tareas fáciles.—
El Ministerio de Curación,
399 (1905)
.
Adiestremos la mente para que no mire al yo
—Debería adies-
trarse la mente para que no mire al yo, para que se espacie en te-
mas elevados y ennoblecedores. No permitamos que las preciosas
horas de la vida se malgasten en soñar con alguna gran obra a reali-
zar en el futuro, mientras se descuidan los pequeños deberes de la
actualidad.—
The Signs of the Times, 15 de junio de 1882
.
La inactividad es perjudicial para la salud
—Los inválidos no
deberían resignarse a la inactividad. Esto es sumamente perjudicial
para la salud. Hay que ejercer fuerza de voluntad; hay que vencer
la aversión al ejercicio activo y el temor a asumir toda clase de
responsabilidades. Nunca recuperarán la salud a menos que se des-
embaracen de esa condición mental de indiferencia y somnolencia,
y se levanten para ponerse en acción.—
The Signs of the Times, 15
de junio de 1882
.
Demasiado indolentes para usar sus facultades
—Los que
sean demasiado indolentes para asumir sus responsabilidades y ejer-
citar sus facultades, no recibirán la bendición de Dios, y la habilidad
que tenían les será quitada y dada a los obreros activos y celosos
que aumentan sus talentos como consecuencia del uso constante.—
Testimonies for the Church 4:458, 459 (1880)
.