Página 248 - Mente, C

Basic HTML Version

244
Mente, Cáracter y Personalidad 2
y produce salud mental y física.—
Testimonies for the Church 4:56
(1876)
.
Cada persona es la fuente de su propia felicidad
—La vida
que se vive en Cristo es una vida llena de reposo. La inquietud, el
descontento y la agitación revelan la ausencia del Salvador. Si hacéis
entrar a Jesús en vuestra vida, ésta se llenará de obras buenas y
nobles para el Maestro. Os olvidaréis de serviros a vosotros mismos,
y viviréis siempre más cerca del amado Salvador; vuestro carácter
se volverá semejante al de Cristo, y cuantos os rodeen conocerán
que habéis estado con Jesús y aprendido de él.
Cada uno posee en sí mismo la fuente de su propia felicidad o
desgracia. Si quiere, puede elevarse por encima del bajo sentimenta-
lismo que constituye la experiencia de muchos; pero mientras esté
henchido de sí mismo, nada puede hacer el Señor por él. Satanás nos
presentará proyectos ambiciosos para deslumbrar nuestros sentidos,
pero debemos recordar siempre el “premio de la soberana vocación
de Dios en Cristo Jesús”.
Filipenses 3:14
. Llenad esta vida con todas
las buenas obras que os sea posible hacer. “Y los entendidos res-
plandecerán como el resplandor del firmamento; y los que enseñan a
justicia la multitud, como las estrellas a perpetua eternidad”.
Daniel
12:3
.—
Joyas de los Testimonios 2:189, 190 (1889)
.
[670]
El impulso más fuerte del hombre
—La Biblia presenta ante
nuestra vista las inescrutables riquezas y los tesoros inmortales de
los cielos. Los impulsos más fuertes del hombre lo arrastran a tratar
de procurar su propia felicidad. La Biblia reconoce este deseo y nos
muestra que todo el cielo se unirá a los esfuerzos que el hombre haga
por conseguir la dicha. Además, revela la condición según la cual
se da la paz de Cristo a los hombres. Describe un hogar de dicha y
resplandor sempiternos, donde no habrá lágrimas ni necesidades.—
MeM 165 (1888)
.
Los cristianos disfrutan de verdadera felicidad
—Si hay al-
guien que continuamente debe estar agradecido, es el seguidor de
Cristo. Si hay alguien que disfruta de un verdadero gozo aun en esta
vida, es el fiel cristiano.—
Nuestra Elavada Vocacion, 203 (1859)
.
Deberíamos ser la gente más feliz de la tierra, y no pedirle perdón
al mundo por ser cristianos.—
Manuscrito 17, 1893
.
Un amigo que nunca falla
—Este es Jesús, la vida de toda gra-
cia, la vida de toda promesa, la vida de todo rito y la vida de toda