Página 306 - Mente, C

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Capítulo 79—El hipnotismo y sus peligro
Pongámonos en guardia
—En estos días cuando el escepticis-
mo y el paganismo aparecen con tanta frecuencia vestidos con un
ropaje científico, necesitamos cuidarnos en todos lados. Nuestro
gran adversario está engañando mediante ellos a miles de personas,
y las está conduciendo cautivas conforme a su voluntad. Saca una
enorme ventaja de las ciencias que conciernen a la mente. Mediante
ellas se arrastra como serpiente, imperceptiblemente, para corromper
la obra de Dios.
Esta entrada de Satanás por medio de estas ciencias ha sido bien
planeada. Mediante el conducto proporcionado por la frenología, la
psicología y el mesmerismo [hipnotismo], llega más directamente
a los miembros de esta generación, y trabaja con ese poder que
caracterizará sus esfuerzos cerca del fin del tiempo de gracia. Las
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mentes de miles de personas han sido envenenadas por este medio y
conducidas al paganismo.
Mientras se cree que una mente afecta en forma maravillosa a
otra mente, Satanás, que está listo para aprovechar cualquier ventaja,
se introduce y trabaja en un lado y en otro. Y cuando los que se
dedican a estas ciencias se alaban exageradamente debido a las
grandes y buenas obras que afirman llevar a cabo, no se dan cuenta
del poder para el mal que están fomentando; pero es un poder que
trabajará con toda clase de señales y milagros mentirosos; con todo
engaño de iniquidad. Note la influencia de estas ciencias, apreciado
lector, porque todavía no ha terminado el conflicto entre Cristo y
Satanás...
El descuido de la oración hace que los hombres confíen en sus
propias fuerzas y abran las puertas a la tentación. En muchos casos
véase el capítulo 78, “control de una mente sobre otra”.
nota
: para tener una idea aproximada del sentido de la palabra
psicología
usada aquí por
la autora, el lector debe tener en cuenta las connotaciones y acepciones que ésta tenía
entre 1850 y 1880. entonces, se la relacionaba a menudo con el mesmerismo (hipnosis) y
la frenología. véase la nota explicativa que se encuentra al final de este capítulo; como así
también los capítulos 2 (“el cristiano y la psicología”) y 3 (“peligros de la psicología”).
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