Página 332 - Mensajes Selectos Tomo 3 (2000)

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Capítulo 48—Los profetas bíblicos escribieron para
nuestro tiempo
Nunca estamos ausentes de la mente de Dios. Dios es nuestro
gozo y nuestra salvación. Cada uno de los profetas antiguos habló
menos para su propio tiempo que para el nuestro, de manera que
sus profecías son válidas para nosotros. “Y estas cosas acontecieron
como ejemplo, y están escritas para amonestarnos a nosotros, a
quienes han alcanzado los fines de los siglos”.
1 Corintios 10:11
.
“A éstos se les reveló que no para sí mismos, sino para nosotros,
administraban las cosas que ahora os son anunciadas por los que os
han predicado el evangelio por el Espíritu Santo enviado del cielo;
cosas en las cuales anhelan mirar los ángeles”.
1 Pedro 1:12
.
La Biblia ha sido vuestro libro de estudio. Está bien que lo sea,
porque es el verdadero consejo de Dios, y es el conductor de todas
las santas influencias que el mundo ha contenido desde la creación.
Tenemos el relato animador de que Enoc caminó con Dios. Si Enoc
caminó con Dios, en esa época de degeneración justamente antes de
la destrucción del mundo por el diluvio, debemos recibir valor y ser
estimulados con su ejemplo, en el sentido de que no necesitamos
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ser contaminados por el mundo, sino que, en medio de todas sus
influencias y tendencias corruptoras, podemos caminar con Dios.
Podemos tener la mente de Cristo.
Tesoros para la última generación
Enoc, séptimo desde Adán, estuvo profetizando siempre la ve-
nida del Señor. Este gran acontecimiento le había sido revelado
en visión. Abel, aunque muerto, está siempre hablando de la san-
gre de Cristo, que es la única que puede hacer nuestras ofrendas
y nuestros dones perfectos. La Biblia ha acumulado y reunido sus
tesoros para esta última generación. Todos los grandes eventos y las
solemnes transacciones de la historia del Antiguo Testamento, han
sido repetidas y se están repitiendo en la iglesia en estos últimos
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