La influencia de la incredulidad
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El hermano C. es desconsiderado en sus palabras y actos. Pala-
bras ociosas, por las cuales tendrá que rendir cuenta en el día de Dios,
brotan casi constantemente de sus labios. Se coloca en el terreno del
enemigo y, como consecuencia, no tiene el Espíritu de Cristo. De
vez en cuando reconoce que ha cometido un error, que ha estado
desperdiciando momentos preciosos, valiosos como el oro, que pudo
haber empleado en purificar su propio corazón. Ha estado viendo
las faltas de los demás, viviendo y nutriéndose de sus errores; y esto
es inanición espiritual. Todo reavivamiento está propenso a atraer
personas a la iglesia que no están realmente convertidas. Tienen la
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verdad de nombre, pero no son santificados por su dulce influencia.
Como están faltos de gracia, son egoístas, duros e inflexibles. Las
tales personas son siempre indignas de confianza. Siempre estarán
haciendo y diciendo cosas que son contrarias a la verdad. Es digna
de lástima la iglesia sobre la cual se impone semejante carga. El
mundo se opone a la iglesia y Satanás y sus ángeles están cons-
tantemente en guerra con ella. Por lo tanto, los defectos de estos
miembros indignos se atribuyen a aquellos que están firmes en la fe.
Los que creen la verdad debieran estar determinados a ayudar y
no estorbar a los pocos en _____ que luchan bajo el desaliento. Cada
uno de los miembros de la iglesia debiera cuidar celosamente que
los enemigos de nuestra fe no tengan ocasión de triunfar sobre ellos
en su estado de inercia y alejamiento de Dios. Algunos han desper-
diciado su influencia cuando con un poco de abnegación, esfuerzo y
celo, pudieran haber sido un aporte positivo en favor del bien. Este
celo no vendrá sin esfuerzo, sin luchas decididas. Si sólo quedaran
tres almas fieles en la iglesia de _____, y si estuvieran vinculadas
con Dios, serían conductos vivientes de luz, y él aumentaría su nú-
mero. Dios ha levantado portaestandartes en _____. Algunos se han
mudado, algunos han fallecido y otros han muerto espiritualmente;
han prestado sus servicios a Satanás. No se dan cuenta que vendrá
el tiempo cuando se han de ajustar sus cuentas en los registros del
cielo y cuando quedará en claro cuál sea la obra de cada persona.
No olvidéis que todos serán juzgados conforme a sus obras. Mi
hermano vacilante, discutidor y acusador, cuando el registro de tu
vida sea abierto ante ti en el gran día de rendimiento de cuentas,
¿cómo podrá subsistir? “Vuestras palabras contra mí han sido violen-
tas, dice Jehová. Y, con todo, decís, ¿Qué hemos hablado contra ti?