Página 109 - Testimonios para la Iglesia, Tomo 9 (1998)

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Métodos de trabajo
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personas que han manifestado interés en la verdad, a fin de instruirlas.
Esta obra necesaria no debe hacerse en forma mezquina, para no
causar una impresión desfavorable en la gente. Todo lo que se haga
debiera revelar en forma favorable al Autor de la verdad y representar
debidamente la santidad e importancia de las verdades del mensaje
del tercer ángel.
Hay que ofrecer al público clases de cocina para enseñar a la
gente a preparar alimentos sanos. Es necesario explicar la necesidad
de no usar alimentos perjudiciales para la salud. Pero nunca debiéra-
mos proponer dietas que desnutran a la gente. Es posible tener una
dieta sana y nutritiva sin usar té, café ni carne. La obra de enseñar
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a la gente a preparar comida sana y apetitosa, es de la más grande
importancia.
La obra de la reforma pro salud es el medio que Dios tiene
para aliviar el sufrimiento que hay en el mundo y para purificar
a su iglesia. Enseñad a la gente que puede obrar como las manos
ayudadoras de Dios al colaborar con el Maestro en la restauración
de la salud física y espiritual. Esta obra lleva la firma del cielo y
abrirá puertas para la entrada de otras preciosas verdades. Hay lugar
para que trabajen todos los que deseen ocuparse de esta obra con
inteligencia.
Se me ha encomendado que presente este mensaje: Mantened
en alto la obra de la reforma pro salud. Mostrad con gran claridad
su valor para que se sienta una amplia necesidad de practicarla. La
abstinencia de todo alimento y bebida perjudiciales es el fruto de la
verdadera religión. El que está cabalmente convertido abandonará
todo hábito y apetencia perjudiciales. Mediante la abstinencia total
vencerá su deseo de consumir productos destructores de la salud.
Se me ha instruido que diga a los que se ocupan de la reforma
pro salud: Seguid adelante. La obra necesita toda la influencia que
podáis ejercer para rechazar la ola de los males morales. Que los
que enseñan el mensaje del tercer ángel se mantengan fieles a su co-
metido. “Así que hermanos, os ruego por las misericordias de Dios,
que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable
a Dios, que es vuestro culto racional. No os conforméis a este siglo,
sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendi-
miento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios,
agradable y perfecta”.
Romanos 12:1-2
. Que a los que trabajan con