Página 84 - Testimonios para la Iglesia, Tomo 9 (1998)

Basic HTML Version

80
Testimonios para la Iglesia, Tomo 9
constantemente, debiera efectuarse un esfuerzo especial y continuo
para difundir los brillantes rayos de la luz de la verdad. Los libros
El
ministerio de curación
y
Palabras de vida
, se adaptan especialmente
para ser vendidos en centros de turismo, por lo que debiera hacerse
todo lo posible para dejar ejemplares de estas obras en manos de
los que disponen de tiempo libre y tienen inclinación a la lectura.
[70]
Especialmente los que andan en busca de salud necesitan el libro
El ministerio de curación
. Hay que aprovechar toda oportunidad
posible de alcanzar a esta clase de personas.
Me he llenado de gozo al enterarme del reavivamiento del plan
para ayudar financieramente a las instituciones en el sur de Califor-
nia en los últimos meses. Algunas de las enfermeras del Hospital
de Loma Linda han sido preparadas para vender
El ministerio de
curación;
y mientras visitaban los hogares de los pueblos vecinos,
recibieron abundantemente las bendiciones del cielo y realizaron
impresiones favorables en favor de nuestro pueblo y su obra.
En el Colegio de San Fernando los profesores llevaron a cabo
recientemente un reavivamiento del interés en la venta de
Palabras
de vida del gran Maestro
. Grupos de alumnos, después de estudiar
con oración el libro, visitaron Los Angeles en compañía de sus
profesores y obtuvieron una sólida y valiosa experiencia que estiman
como de más valor que la plata y el oro. Esta clase de obra es, en
efecto, uno de los medios que Dios ha establecido para darle a
nuestra juventud preparación misionera; y quienes descuidan de
aprovechar estas oportunidades pierden una experiencia del valor
más elevado. Los alumnos, al participar con entusiasmo de esta
obra, pueden aprender a hablar con tacto con hombres y mujeres de
diversas profesiones, a tratar con ellos cortésmente y a inducirlos a
considerar favorablemente las verdades contenidas en los libros que
venden.
Nuestra preocupación principal no debiera consistir tanto en
obtener dinero como en salvar almas. Por esto, debemos, por todos
los medios posibles, tratar de enseñar a los alumnos cómo impartir
un conocimiento del mensaje del tercer ángel. Cuando logramos
salvar a la gente, los que hemos añadido a la fe emplean a su vez sus
talentos para comunicar la verdad a otros. Cuando trabajemos con
diligencia para la salvación de nuestros semejantes, Dios dará éxito
a todos nuestros esfuerzos.