Página 129 - Consejos Sobre la Obra de la Escuela Sabatica (1992)

Basic HTML Version

Han de presentarse temas remozados
El alma debería ser como un almacén lleno de valiosas y abun-
dantes provisiones. En el púlpito, en la escuela sabática, en el culto
de oración y en la sociedad, deberíamos tener temas nuevos con
que impartir luz a otros. Deberíamos seguir el ejemplo de Jesús, el
Maestro perfecto. El educó a los hombres, revelándoles el carácter
del Dios vivo. Dijo: “Esta, empero, es la vida eterna; que te conozcan
el solo Dios verdadero, y a Jesucristo, al cual has enviado.” Este es
el tema importante que debe grabarse en la mente de los jóvenes,
porque ellos necesitan tener un conocimiento del carácter paternal de
Dios, para ser inducidos a subordinar los intereses temporales a los
eternos. Al contemplar el carácter de Dios, se creará en el corazón
de ellos un intenso deseo de comunicar a otros la hermosura y el
poder de la verdad.
El poder transformador de la religión
¡Ojalá todo hombre, mujer y niño que tienen que tratar con
las mentes humanas, tengan la verdad tan entretejida en el alma
que se revele en el espíritu, en las palabras, en el carácter y en las
[123]
acciones! El poder santificador de la verdad debería inducir a todo
aquel que enseña en la escuela sabática, o que ocupa un puesto en
nuestras instituciones, a tener una experiencia tal que pueda decir:
“Yo sé a quién he creído.” Hay poder transformador en la religión
de Jesucristo, y este poder debe manifestarse en nosotros por una
humildad mucho mayor, por una fe viva y más ferviente, a fin de
que lleguemos a ser una luz para el mundo. El
yo
debe ser humillado
y Cristo ensalzado. ¿Por qué aquellos a quienes Dios confía algún
trabajo en su viña moral se engríen tan fácilmente?
Preguntas escudriñadoras
¿Por qué muchos parecen creer que una posición de responsa-
bilidad enaltece al que la ocupa? ¿Por qué se vuelven tan llenos
125