24
Consejos Sobre el Régimen Alimenticio
aún. Su inteligencia, conocimiento y virtud se desarrollarán así para
adquirir mayor fuerza y más perfecta simetría.
Por otra parte, puede permitir que sus facultades se herrumbren
por falta de uso, o que sean pervertidas por malos hábitos, y por falta
de dominio propio o de vigor moral y religioso. Entonces marcha
hacia abajo; es desobediente a la ley de Dios y a las leyes de la
salud. El apetito lo domina. La inclinación lo desvía. Le resulta más
fácil permitir que los poderes del mal, que están siempre activos,
lo arrastren hacia atrás que luchar contra ellos y avanzar. Sigue
luego la disipación, la enfermedad y la muerte. Esta es la historia de
muchas vidas que podrían haber sido útiles en la causa de Dios y la
humanidad.
Buscad la perfección
2. Dios quiere que alcancemos el ideal de perfección hecho
posible para nosotros por el don de Cristo. Nos invita a escoger el
lado de la justicia, a ponernos en relación con los agentes celestiales,
a adoptar principios que restaurarán en nosotros la imagen divina.
En su Palabra escrita y en el gran libro de la naturaleza ha revelado
los principios de la vida. Es tarea nuestra conocer estos principios y
por medio de la obediencia cooperar con Dios en restaurar la salud
del cuerpo tanto como la del alma.—
El Ministerio de Curación, 77,
78 (1905)
.
3. El organismo vivo es propiedad de Dios; le pertenece por
el derecho que le confieren la creación y la redención. Por lo tan-
to, por el empleo equivocado de cualquiera de nuestras facultades,
despojamos a Dios del honor que le debemos.—
Carta 73a, 1896
.
Un asunto de obediencia
[17]
4. La obligación que tenemos para con Dios de presentarle cuer-
pos limpios, puros y sanos, no se comprende.—
Manuscrito 49, 1897
.
5. El dejar de cuidar la maquinaria viviente es un insulto in-
fligido al Creador. Existen reglas divinamente establecidas que, si
se observan, guardarán a los seres humanos de la enfermedad y la
muerte prematura.—
Carta 120, 1901
.