Página 361 - Consejos Sobre la Salud (1989)

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Sencillez y economía
En el establecimiento y desarrollo de la obra hay que manifestar
la economía más estricta. Es necesario emplear obreros que sean pro-
ductores tanto como consumidores. En ningún caso se debe invertir
el dinero para la ostentación. La obra médica misionera evangélica
debe llevarse a cabo con sencillez, como lo fue la obra de la Majestad
del cielo, quien al ver la necesidad de un mundo pecador y perdido,
depuso sus atavíos y corona reales para revestir su divinidad con hu-
manidad, a fin de ponerse a la cabeza de la humanidad. Llevó a cabo
de tal manera su obra misionera que nos dejó un ejemplo perfecto
para que fuese seguido por los seres humanos. Declaró: “Si alguno
quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz, y
sígame”.
Mateo 16:24
. Todo verdadero médico misionero obedecerá
estas palabras. No se esforzará por seguir las costumbres mundanas
y hacer ostentación, pensando que en esa forma ganará almas para el
Salvador. No, no. Si la Majestad del cielo pudo abandonar su hogar
glorioso para venir a este mundo manchado y desfigurado por la
maldición, para establecer un método correcto de llevar a cabo la
obra médica misionera, nosotros como sus seguidores debiéramos
practicar la misma abnegación y sacrificio.
Cristo presenta a todos esta invitación: “Venid a mí todos los
que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. Llevad mi
yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de
corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas”.
Mateo 11:28-
30
. Si todos llevaran el yugo de Cristo, si todos aprendieran en su
escuela la lección que él enseña, habría recursos suficientes para
establecer la obra médica evangélica en muchos lugares.
Que nadie diga: “Me dedicaré a esta obra por una suma estipu-
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lada. Si no recibo esta suma, no haré el trabajo”. Los que hablan
en esta forma demuestran que no llevan el yugo de Cristo; no están
aprendiendo su humildad y mansedumbre. Cristo pudo haber veni-
do a este mundo con un séquito de ángeles, pero en cambio vino
como un bebé y vivió una vida de humildad y pobreza. Su gloria
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