En auxilio de nuestros colegios
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tiempo sin que el himno de libertad del jubileo se cante en nuestros
confines.
No os canséis de hacer bien
Me alegro de que haya habido esfuerzo tan armonioso para
llevar a efecto el propósito de Dios y aprovechar hasta el máximo
su providencia. Este esfuerzo por poner en circulación
Lecciones
Prácticas del Gran Maestro
está demostrando lo que se puede hacer
en el campo de colportaje. A los pastores, alumnos, padres, madres,
y jóvenes y señoritas que se hayan empeñado en esta tarea, quiero
decirles: No se debilite vuestro interés. Siga adelante esta obra sin
fluctuar, perseverante y sublimemente, hasta que la última deuda
quede eliminada de nuestros colegios y se forme un fondo destinado
al establecimiento de colegios en campos importantes, donde exista
gran necesidad de obra educacional.
A medida que se llame a otras labores a los pastores y obreros
bíblicos, díganles los miembros de nuestras iglesias: “Id adelante con
el trabajo que se os ha señalado; nosotros continuaremos trabajando
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por la circulación de
Lecciones Prácticas del Gran Maestro
y por
librar de deudas a nuestros colegios”. Que nadie piense que esta
tarea debe terminar con el esfuerzo especial de 1900 y 1901. El
campo jamás está agotado, y dicho libro debe venderse en bien de
nuestros colegios durante los años por venir.
Tengamos fe en Dios. En su nombre llevemos adelante su palabra
sin vacilar. La obra que nos ha mandado hacer, él la convertirá
en una bendición para nosotros. Y cuando su plan para aliviar a
nuestros colegios haya sido vindicado, cuando la tarea señalada
haya sido plenamente cumplida, él nos indicará lo que debemos
hacer a continuación.
Por tanto tiempo como el mensaje de misericordia deba darse al
mundo, habrá un pedido de esfuerzos en pro de otras instituciones y
empresas similares a la de librar de deudas a nuestros colegios. Y por
tanto tiempo como dure el tiempo de gracia habrá para el colportor
oportunidad de trabajar. Cuando las denominaciones religiosas se
unan con el papado para oprimir al pueblo de Dios, el colportaje
evangélico abrirá lugares en que exista libertad religiosa. Si en
un lugar la persecución se vuelve severa, hagan los obreros como