Página 103 - El Evangelismo (1994)

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La organización de las reuniones evangélicas
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El tiempo empleado en esa forma está complicando la obra, porque
el gran Jefe de los obreros es dejado fuera en la tarea de cuidar
su propia heredad. Los hombres asumen la tarea de remendar los
caracteres defectuosos, y lo único que consiguen es empeorar los
defectos. Sería mejor que dejasen que Dios llevara a cabo su obra,
porque él no los considera capaces de remodelar el carácter...
En vez de trabajar para establecer reglas y reglamentos conven-
dría que oraseis y sometieseis a Cristo vuestra propia voluntad y
vuestros caminos. El no se complace cuando hacéis difícil aquello
que él ha hecho fácil. El dice: “Llevad mi yugo sobre vosotros, y
aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis
descanso para vuestras almas”.
Mateo 11:28
. El Señor Jesús ama su
herencia, y si los hombres no consideran que es prerrogativa especial
suya prescribir las reglas para sus colaboradores, pero en cambio
introducen las reglas de Cristo en su vida y copian sus lecciones,
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entonces cada uno será un ejemplo, y no un juez.—
Manuscrito 44,
1894
.
De una manera contraria a los planes humanos
—A menos
que aquellos que pueden ayudar en ----- sean despertados a un
sentido de su deber, no reconocerán la obra de Dios cuando se
oiga el fuerte clamor del tercer ángel. Cuando brille la luz para
iluminar la tierra, en lugar de acudir en ayuda del Señor, ellos querrán
detener su obra para que se conforme a sus propias ideas estrechas.
El Señor actuará en esta obra final mucho más fuera del orden
común de las cosas, y de una manera que será contraria a todos los
planes humanos. Habrá entre nosotros personas que siempre querrán
controlar la obra de Dios, y dictar hasta los movimientos que deban
hacerse cuando la obra progrese bajo la dirección del ángel que se
une al tercer mensaje que ha de ser dado al mundo. Dios utilizará
formas y medios por los cuales se verá que él está tomando las
riendas en sus propias manos. Los obreros se sorprenderán por los
medios sencillos que él utilizará para realizar y perfeccionar su obra
de justicia. Los que-son considerados buenos obreros necesitarán
acercarse a Dios, necesitarán el toque divino. Necesitarán beber más
profunda y continuamente en la fuente de agua viva, para poder
discernir la obra de Dios en todo punto. Los obreros cometerán
errores, pero vosotros debéis darles una oportunidad de corregir sus