Página 119 - Hijas De Dios (1999)

Basic HTML Version

El ministerio en el vecindario
115
sus oraciones de fe harían mucho bien. Nuestras hermanas pueden
ser obreras juntamente con Dios. Y cuando esta vida termine, po-
drán mirar hacia atrás en su experiencia y ver que su vida no fue
un desierto estéril, sino un campo que dio flores y frutos por su
trabajo.—
Manuscript Releases 7:40-41 (1874)
.
Una juventud entrenada para servir a otros
Organizados para servir
—Jóvenes y señoritas: ¿Queréis alis-
taros como soldados de Cristo y formar sociedades que pongan todas
sus habilidades, talentos y tacto al servicio del Maestro para salvar
a las almas de la ruina? Que se organicen sociedades de jóvenes
en cada iglesia... ¿Se organizarán los jóvenes y señoritas que real-
mente aman a Jesús para trabajar como obreros no solamente por
los miembros, sino por los que no son de la fe?—
The Signs of the
Times, 29 de mayo de 1893
.
Instruidos en métodos prácticos de trabajo misionero
—Para
el crecimiento de nuestras iglesias, se necesita ahora el concurso de
obreros sabios que puedan discernir y desarrollar los talentos que se
encuentran en la iglesia, para ponerlos al servicio del Maestro. Aque-
llos que visitan las iglesias deben dar instrucción acerca de cómo
[124]
dar estudios bíblicos y hacer trabajo misionero. Que haya una clase
para el entrenamiento de los jóvenes que desean trabajar y quieren
aprender cómo hacerlo. Nuestros jóvenes y señoritas debieran ser
educados para llegar a ser obreros en el hogar, en el vecindario y en
la iglesia.—
The Review and Herald, 15 de mayo de 1888
.
Los jóvenes pueden dirigir reuniones
—Antes de que presenta-
ra este asunto a los estudiantes del Colegio de Avondale [Australia],
eran muy pocos los que se habían dedicado a hacer trabajo misio-
nero, visitando a las familias, distribuyendo literatura y dirigiendo
estudios bíblicos en las zonas cercanas. Muchos de los estudiantes
tenían la misma teoría sostenida en otros colegios, que es mejor
aprender todo lo que se pueda mientras se está en el colegio, y
esperar hasta salir del mismo para hacer obra misionera...
Cuando estudiamos qué sería lo mejor para las iglesias de la
región y para los estudiantes del colegio que habían tenido una
experiencia en trabajar para Cristo, se consideró que lo mejor era
animar a algunas personas de cierta experiencia a salir del colegio