Página 147 - Mensajes para los J

Basic HTML Version

El ejercicio de la voluntad
143
obras en Dios. Habrá en ti un poder, un fervor y una sencillez que te
constituirán en un instrumento perfecto en manos de Dios.
Necesitas beber diariamente de la fuente de la verdad, con el
fin de entender el secreto del placer y el gozo en el Señor. Pero
debes recordar que tu voluntad es la fuente de todas tus acciones.
Esta voluntad, que constituye un factor tan importante en el carácter
del hombre, fue puesta, en ocasión de la caída, bajo el dominio de
Satanás; y desde entonces él ha estado obrando en el hombre el
querer y hacer su beneplácito, pero para la completa miseria y ruina
del ser humano.
Pero el infinito sacrificio de Dios al dar a Jesús su amado Hijo,
para que fuese sacrificado por el pecado, le permite decir, sin violar
ningún principio de su gobierno: “Entrégate a mí; dame tu voluntad;
sustráela del dominio de Satanás y yo tomaré posesión de ella;
entonces podré obrar en ti el querer y el hacer según mi voluntad”.
Cuando él te da la mente de Cristo, tu voluntad llega a ser como la
suya, y tu carácter se transforma para ser como el carácter de Cristo.
¿Es tu propósito hacer la voluntad de Dios? ¿Quieres obedecer las
Escrituras? “Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí
mismo, tome su cruz y sígame”
No existe tal cosa como seguir a Cristo a menos que rehúses
satisfacer tus inclinaciones y decidas obedecer a Dios. No son tus
sentimientos ni tus emociones los que te hacen un hijo de Dios, sino
[107]
el hacer la voluntad de Dios. Si tu voluntad llega a ser la voluntad
de Dios, te espera una vida de utilidad. Entonces podrás mante-
nerte firme como hombre de Dios, un ejemplo de buenas obras.
Entonces ayudarás a mantener las reglas de la disciplina en vez de
ayudar a quebrantarlas. Entonces ayudarás a mantener el orden, en
vez de despreciarlo e incitar a otros, con tu proceder, a una vida
desordenada.
Te digo, en el temor de Dios, que sé lo que puedes llegar a ser
si pones tu voluntad de parte de Dios. “Somos colaboradores con
Dios”
Puedes estar haciendo tu obra para hoy y la eternidad en
forma tal que soporte la prueba del juicio. ¿Quieres hacer la prueba?
¿Quieres cambiar completamente ahora? Eres objeto del amor y la
intercesión de Cristo. ¿Quieres entregarte ahora a Dios y ayudar a
los que actúan como centinelas para guardar los intereses de su obra,