Página 232 - El Ministerio Pastoral (1995)

Basic HTML Version

Capítulo 35—La incorporación de los nuevos
miembros
Los ministros que despiertan un interés, pero dejan la obra
sin terminar, puede que sean puestos a un lado
—Los ministros
deben enseñar que todo el que acepte la verdad deberá dar frutos para
la gloria de Dios. Deben enseñar que la abnegación debe ser practi-
cada diariamente; que muchas de las cosas que han sido atesoradas
deben dejarse; y que muchas tareas, aunque parezcan desagradables,
deben ser hechas. Los intereses de negocios, compromisos sociales,
comodidad, honor, reputación,—en resumidas cuentas, todo, debe
ser sometido a los reclamos superiores y siempre pre-eminentes de
Cristo. Los ministros que no son hombres de una piedad viva, que
despiertan interés entre la gente, pero dejan la obra sin terminar,
crean un campo excesivamente difícil para que otros entren y ter-
minen la obra que ellos han dejado sin completar. Estos hombres
serán probados; y si no hacen su obra con más fidelidad, después
de una nueva prueba, serán dejados a un lado como personas que
obstruyen el terreno, como atalayas infieles.—
Testimonies for the
Church 4:317
.
Den algo que hacer a los nuevos miembros
—Las personas
que se ocupan más activamente en hacer con interés y fidelidad la
obra que les corresponde en la tarea de ganar almas para Cristo, son
las que más se desarrollan en espiritualidad y devoción. Su trabajo
muy activo ha constituido el instrumento de su espiritualidad. La
religión corre peligro de perder en profundidad lo que gana en
amplitud. Esto no necesita ocurrir, si en lugar de largos sermones
se proporciona una sabia educación a los recién llegados a la fe.
Enseñadles, dándoles algo que hacer, en alguna clase de trabajo
espiritual, para que su primer amor no muera sino que aumente en
fervor. Hacedles sentir que ellos no tienen que ser llevados y que no
[236]
deben reclinarse sobre la iglesia para obtener su apoyo, sino hacedles
ver que deben tener raíces en ellos mismos. Pueden ser, en diversos
aspectos y según sean sus habilidades, útiles ayudando a la iglesia a
228