Página 303 - El Ministerio de Publicaciones (1997)

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Publicaciones para terminar la obra
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delante de él y hubiésemos proclamado la verdad de la temperancia
de una manera clara y directa.—
Obreros Evangélicos, 399
.
La cuestión de la temperancia debe recibir apoyo decidido del
pueblo de Dios. La intemperancia lucha por colocarse a la cabeza;
la complacencia de sí mismo está aumentando, y las publicaciones
que tratan de la reforma pro salud se necesitan en gran medida.
Las publicaciones que presentan este tema son la mano ayudadora
del Evangelio, porque inducen a las almas a investigar la Biblia
para comprender mejor la verdad. Hay que hacer resonar una nota
de advertencia contra el gran mal de la intemperancia; y para que
esto pueda realizarse, todo observador del sábado debiera estudiar y
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practicar la instrucción contenida en nuestras revistas pro salud y en
nuestros libros de salud. Y debieran hacer más que esto: debieran
realizar esfuerzos definidos para hacer circular estas publicaciones
entre sus vecinos. La venta de nuestras publicaciones de salud de
ninguna manera estorbará la venta de otras publicaciones que tratan
de diversos aspectos del mensaje del tercer ángel. Todos han de
preparar el camino para la venida del Señor.—
Consejos sobre la
Salud, 459, 460
.
Los cambios en los libros deben ser hechos sólo por las per-
sonas responsables
—En algunos de nuestros libros importantes
que han estado impresos desde hace años, y que han traído a mu-
chos al conocimiento de la verdad, quizá haya asuntos de menor
importancia que demandan un cuidadoso estudio y corrección. Sean
considerados esos asuntos por los que son regularmente asignados
para supervisar nuestras publicaciones. Esos hermanos, nuestros
colportores y nuestros ministros, no magnifiquen esos asuntos en tal
forma que disminuyan la influencia de esos buenos libros salvadores
de almas. Si nos ocupáramos de desacreditar nuestras publicaciones,
colocaríamos armas en las manos de los que se han apartado de la
fe, y confundiríamos la mente de los recién convertidos al mensaje.
Mientras menos se haga para cambiar innecesariamente nuestras
publicaciones, tanto mejor será.—
Mensajes Selectos 1:194
.
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