Página 283 - Notas biogr

Basic HTML Version

Peligro de adoptar directivas mundanas en la obra de Dios
279
cie de las cosas, discerniendo los pensamientos e intenciones del
corazón. No existe un solo hecho propio de las tinieblas, ni un solo
plan, ni una sola imaginación del corazón, ni un solo pensamiento
de la mente, que él no lea como si fuera en un libro abierto. Todo
acto, toda palabra, todo motivo, es fielmente anotado en los registros
del gran Dios que investiga el corazón, y que dijo: ‘Yo nocozco tus
obras’.
“Se me mostró que las insensateces de Israel en los días de
Samuel serán repetidas entre el pueblo de Dios de hoy, a menos que
haya mayor humildad, menor confianza en el yo, y más confianza
en el Señor Dios de Israel, el Gobernante del pueblo. Es solamente
cuando el poder divino se combina con el esfuerzo humano cuando la
obra soportará la prueba. Cuando los hombres no se fíen más de los
hombres o en su propio juicio, sino que hagan de Dios su confianza,
esto se manifestará en todos los casos en una mansedumbre de
espíritu, en hablar menos y orar más, en ejercer el cuidado necesario
en los planes y movimientos. Tales hombres revelarán el hecho de
que su dependencia de Dios, y que tienen la mente de Cristo.
“Una y otra vez se me mostró que el pueblo de Dios de estos
últimos días no puede estar seguro al confiar en hombres, y al hacer
de la carne su brazo. La palanca poderosa de la verdad los ha saca-
do del mundo como piedras ásperas que han de ser recuadradas y
pulidas para ser usadas en el edificio celestial. Deben ser trabajados
por los profetas por medio de reproches, advertencias, amonestacio-
[355]
nes y avisos, a fin de que puedan ser amoldados de acuerdo con el
modelo divino; esta es la obra específica que hará el Consolador,
para transformar el corazón y el carácter, a fin de que los hombres
se mantengan en el camino del Señor...
“Desde 1845, de tiempo en tiempo han sido presentados delante
de mí los peligros del pueblo de Dios, y he visto los peligros que se
agolparían en torno al remanente en estos últimos días. Estos peli-
gros me han sido revelados hasta el tiempo presente. Pronto grandes
escenas han de desenvolverse delante de nosotros. El Señor viene
con gran poder y gloria. Y Satanás sabe que la autoridad que él ha
usurpado terminará para siempre. Su última oportunidad de dominar
al mundo está ahora en sus manos, y él realizará los más decididos
esfuerzos para llevar a cabo la destrucción de los habitantes de la
tierra. Los que creen en la verdad deben ser fieles centinelas que