Página 222 - Nuestra Elevada Vocacion (1962)

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Como un muro de fuego contra la tentación, 23 de julio
En mi corazón he guardado tus dichos, para no pecar contra ti.
Salmos
119:11
.
Satanás busca continuamente influir sobre las mentes humanas mediante
sus artes sutiles. La suya es una mente maestra, dada por Dios, pero prostituida
con todas sus nobles capacidades para oponerse e invalidar los consejos del
Altísimo. ...
Podemos vencer únicamente creyendo en toda palabra que procede de la
boca de Dios. Debemos saber qué está escrito a fin de no ser derrotados por los
sofismas y los encantamientos de Satanás. ... Si hemos sido entrampados por
su poder encantador, en el nombre de Jesús rechacemos ese poder, y rompamos
sin demora con Satanás. ... Aquellos que claman a Dios por liberación del
terrible encantamiento que Satanás teje alrededor de ellos, deben estimar
debidamente las Escrituras. Nuestra única seguridad está en recibir toda la
Biblia, no tomar solamente algunas porciones separadas, sino en creer en
toda la verdad. Vuestros pies están sobre arenas movedizas si despreciáis una
palabra que ha sido escrita. La Biblia es una comunicación divina, y es tan un
mensaje para el alma como si una voz del cielo fuera oída hablándonos. Con
cuánta reverencia, pavor y humillación deberíamos iniciar la investigación de
las Escrituras a fin de aprender de las realidades eternas. ... Que todos estudien
la Biblia sabiendo que la Palabra de Dios es tan perdurable como el trono
eterno. Si estudiáis la Biblia con humildad, con ferviente oración en demanda
de dirección, los ángeles de Dios abrirán para vosotros sus realidades vivas,
y si apreciáis los preceptos de la verdad, ellos serán para vosotros como una
muralla ígnea contra las tentaciones, los engaños y los encantamientos de
Satanás. ...
La Palabra de Dios es apta para salvar vuestras almas, para haceros sabios
para salvación. El salmista dice: “En mi corazón he guardado tus dichos,
para no pecar contra ti”. Entonces ocultemos la palabra de Dios en nuestros
corazones, para que podamos “resistir en el día malo, y estar firmes habiendo
acabado todo”.
Efesios 6:13
.—
The Signs of the Times, 18 de septiembre de
1893
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