Página 212 - Mente, C

Basic HTML Version

208
Mente, Cáracter y Personalidad 1
Debe expulsarse el pensamiento corrompido. Todo intento debe
someterse al cautiverio de Jesucristo. Todas las propensiones ani-
males deben sujetarse a las facultades superiores del alma. El amor
de Dios debe reinar supremo; Cristo debe ocupar un trono indiviso.
Nuestros cuerpos deben ser considerados como su posesión adquiri-
da. Los miembros del cuerpo han de llegar a ser los instrumentos de
la justicia.—
El hogar adventista, 112 (1894)
.
Cambie las sugerencias impuras por pensamientos puros y
elevadores
—Debe mantenerse la mente meditando en temas puros y
[243]
santos. Debe rechazarse de inmediato toda sugestión impura, y deben
cultivarse pensamientos puros, elevadores, la santa contemplación,
obteniendo así más y más conocimiento de Dios ejercitando la mente
en la contemplación de las cosas celestiales. Dios tiene medios
sencillos al alcance de cada caso individual, suficientes para asegurar
el fin último, la salvación del alma.
Propónte alcanzar una norma elevada y santa; mantén en alto tu
ideal; actúa con firme determinación, como Daniel, intrépidamente,
con perseverancia, y nada que pueda hacer el enemigo estorbará
tu progreso. A pesar de los inconvenientes, de los cambios, de las
perplejidades, tú puedes crecer constantemente en vigor mental y en
poder moral.—
En Lugares Celestiales, 199 (1887)
.
No produzca una emergencia
—Cada pasión no santificada de-
be ser puesta bajo el control de la razón santificada mediante la
gracia abundantemente otorgada por Dios en cada emergencia. Pero
no permita que se cree una emergencia, que haya un acto voluntario
que lo ponga donde será asaltado por la tentación, o dé la menor oca-
sión para que otros piensen que es culpable de indiscreción.—
Carta
18, 1891
.
Aléjese del borde del precipicio
—No procure ver cuán cerca
puede caminar del borde del precipicio con seguridad. Evite la pri-
mera aproximación al peligro. No se puede jugar con los intereses
del alma. Su capital es su carácter. Cuídelo como cuidaría un tesoro
valioso. Deben abrigarse firme y constantemente la pureza moral, el
respeto propio y un fuerte poder de resistencia...
Ninguno piense que puede vencer sin la ayuda de Dios. Usted
debe tener la energía, la fortaleza, el poder, de una vida interior
desarrollada dentro suyo. Entonces podrá llevar fruto para piedad
y tendrá un repudio intenso por el vicio. Usted necesita esforzarse