Página 46 - Mensajes Selectos Tomo 1 (1966)

Basic HTML Version

42
Mensajes Selectos Tomo 1
continua tentación para descarriar a las almas. Obra para procurar
oscurecer las percepciones espirituales para que los hombres no
distingan entre lo que es común y lo que es santo. Se me ha hecho
conocer esta distinción mediante una vida de servicio para mi Señor
y Maestro...
Recibí el mensaje: Dedícate a la obra más excelsa jamás confiada
a los mortales. Te daré elevadas aspiraciones y facultades y un
verdadero sentido de la obra de Cristo. No eres tuya, pues fuiste
comprada por un precio, por la vida y muerte del Hijo de Dios. Dios
demanda tu corazón de niña y tu servicio bajo la santificación del
Espíritu Santo.
Me entregué a mí misma a Dios, todo mi ser, para obedecer
a su vocación en todo, y desde entonces mi vida ha transcurrido
dando el mensaje con mi pluma y oralmente delante de grandes
congregaciones. No soy yo la que determino mis palabras y acciones
en tales momentos.
Sin embargo, hay oportunidades cuando deben declararse cosas
comunes, pensamientos comunes deben ocupar la mente, deben es-
cribirse cartas comunes y se debe dar información que ha pasado de
un obrero a otro. Tales palabras, tal información, no son dadas bajo
la inspiración especial del Espíritu de Dios. Se hacen preguntas a
veces que no tienen nada que ver con temas religiosos, y esas pre-
guntas deben ser contestadas. Conversamos acerca de casas y tierras,
transacciones comerciales y ubicación para nuestras instituciones,
sus ventajas y desventajas.
Recibo cartas en las que se me pide consejo en cuanto a muchos
temas extraños, y aconsejo de acuerdo con la luz que se me ha
dado. Vez tras vez los hombres se han opuesto al consejo que se me
instruyó que diera porque no querían recibir la luz dada, y tales casos
me han inducido a buscar al Señor con todo fervor.—
Manuscrito
107, 1909
.
[45]