Página 681 - Testimonios para la Iglesia, Tomo 1 (2003)

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Otras labores
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Newport. Se mostró muy feliz de vernos. Ella y su madre guardaban
el sábado, solas. Su esposo es conductor de los trenes. Esta hermana
hablaba rápido. Nos dijo que le gustaba mucho la
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, porque
no había reuniones a las cuales asistir. Quería libros para distribuir
entre sus vecinos, pero tenía que ganar por sí misma todo el dinero
que gastaba en libros o en la revista. Tuvimos una buena entrevista,
aunque corta, porque el tren partió y tuvimos que separarnos.
“En St. Albans nos encontramos con los Hnos. Gould y A. C.
Bourdeau. El Hno. B. tenía un carruaje cómodo y cubierto, tirado por
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dos caballos, pero guiaba muy despacio, de modo que no llegamos a
Enosburgh sino después de la una de la mañana, cansados y ateridos
de frío. Nos acostamos un poco después de las dos, y dormimos
hasta después de las siete.
“Sábado de mañana. Hay una buena cantidad de gente a pesar
de que los caminos están malos; no los pasan bien ni los trineos ni
los carruajes. Acabo de estar en una reunión, y pasé unos momentos
en conferencia. Tu padre habla esta mañana, y yo en la tarde. Que el
Señor nos ayude, es mi oración. Ya ves qué larga es la carta que te he
escrito. Léesela a los que estén interesados, especialmente al papá
y a la mamá White. Tú ves, Edson, que tenemos suficiente trabajo
que hacer. Espero que no descuides el orar por nosotros. Tu padre
trabaja duro, demasiado duro para su bienestar. A veces se da cuenta
de haber recibido la bendición especial de Dios, y esto lo renueva y
reanima en la obra. No nos hemos permitido ningún descanso desde
que llegamos al Este. Hemos trabajado con todas nuestras fuerzas.
Dios quiera bendecir nuestros débiles esfuerzos para el bien de su
querido pueblo.
“Edson, espero que adornes tu profesión por una vida bien or-
denada y una conversación piadosa. ¡Oh, sé ferviente! Sé celoso y
perseverante en la obra. Vela en oración. Cultiva la humildad y la
mansedumbre. Esto recibirá la aprobación de Dios. Escóndete en
Jesús; sacrifica el amor propio y el orgullo, y procura obtener, hijo
mío, una rica experiencia cristiana para usarla en cualquier posición
que Dios requiera que ocupes. Busca hacer una obra completa y de
corazón. Una obra superficial no pasará la prueba del juicio. Procura
una transformación completa que te distinga del mundo. Que no se
manchen tus manos, tu corazón ni tu carácter por la corrupción que
hay en él. Mantén tu distinción. Dios llama diciendo: ‘Salid de en