Página 41 - Joyas de los Testimonios 2 (2004)

Basic HTML Version

Agentes de Satanás
37
temente debemos procurar la presencia divina, y comprender las
solemnes verdades de que el fin de todas las cosas se acerca y de
que el Juez de toda la tierra está a la puerta! ¿Cómo podéis despre-
ciar sus justos y santos requerimientos? ¿Cómo podéis transgredir
ante la misma faz de Jehová? ¿Cómo podéis albergar pensamientos
profanos y bajas pasiones en plena vista de los ángeles puros y del
Redentor que se dió a sí mismo por vosotros para redimiros de to-
da iniquidad y purificaros como pueblo peculiar, celoso de buenas
obras? Mientras contempléis este asunto a la luz que resplandece de
la cruz de Cristo, ¿no os parecerá el pecado demasiado mezquino y
peligroso para participar en él cuando estáis en los mismos umbrales
del mundo eterno?
[39]
Me dirijo a nuestros hermanos. Si os acercáis a Jesús, y tratáis
de adornar vuestra profesión con una vida bien ordenada y una con-
versación piadosa, vuestros pies serán guardados de extraviarse en
sendas prohibidas. Si tan sólo queréis velar, velar continuamente
en oración, y tan sólo hacéis todo como si estuvieseis en la pre-
sencia inmediata de Dios, seréis salvados de caer en la tentación, y
podréis esperar llevar hasta el fin una vida pura sin mancha ni con-
taminación. Si mantenéis firme hasta el fin el principio de vuestra
confianza, vuestros caminos serán afirmados en Dios, y lo que la
gracia empezó, lo coronará la gloria en el reino de nuestro Dios. Los
frutos del Espíritu son amor, gozo, paz, longanimidad, benignidad,
bondad, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley. Si
Cristo está en nosotros crucificaremos la carne con sus afectos y
concupiscencias.
[40]