Página 87 - Mente, Car

Basic HTML Version

La mente y la salud espiritual
83
que la enfermedad es resultado del pecado; y que es el enemigo caído
quien procura inducirlos a seguir prácticas que destruyen la salud y
el alma. Puede inculcar en sus mentes la necesidad de abnegación
y de obedecer las leyes de la vida y la salud. Puede implantar los
principios correctos especialmente en la mente de los jóvenes.
Dios ama a sus criaturas con un amor a la vez tierno y fuerte.
Ha establecido las leyes de la naturaleza; pero sus leyes no son
exigencias arbitrarias. Cada “no harás”, sea en la ley física o moral,
contiene o implica una promesa. Si obedecemos, las bendiciones
acompañarán nuestros pasos; si desobedecemos, habrá como resulta-
do peligro y desgracia. Las leyes de Dios están destinadas a acercar
más a sus hijos a él. Los salvará del mal y los conducirá al bien,
si quieren ser conducidos; pero nunca los obligará. No podemos
discernir los planes de Dios, pero debemos confiar en él y mostrar
nuestra fe por nuestras obras.—
Joyas de los Testimonios 2:144, 145
(1885)
.
El evangelio es el remedio para las enfermedades provocadas
por el pecado
Cuando se recibe el evangelio en su pureza y con todo su poder,
es un remedio para las enfermedades provocadas por el pecado.
Sale el Sol de justicia “y en sus alas traerá salvación”.
Malaquías
[56]
4:2
. Todo lo que el mundo proporciona no puede sanar el corazón
quebrantado, ni dar paz al espíritu, ni disipar las inquietudes, ni
desterrar la enfermedad. La fama, el genio y el talento son impotentes
para alegrar el corazón entristecido o restaurar la vida malgastada.
La vida de Dios en el alma es la única esperanza del hombre.—
El
Ministerio de Curación, 78 (1905)
.
En el cielo todo es salud
La opinión sostenida por algunos de que la espiritualidad es
perjudicial para la salud, es un sofisma de Satanás. La religión de
la Biblia no es perjudicial para la salud del cuerpo ni de la men-
te. La influencia del Espíritu de Dios es la mejor medicina para la
enfermedad. En el cielo todo es salud; y mientras más profunda-
mente se comprendan las influencias celestiales, más segura será