Página 74 - Joyas de los Testimonios 3 (2004)

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Joyas de los Testimonios 3
es pecado adquirir recursos. El dinero debe ganarse por el trabajo.
Todo joven debe cultivar costumbres de laboriosidad. La Biblia no
condena a nadie por ser rico, si adquirió sus riquezas honradamente.
Es el amor egoísta al dinero mal empleado lo que constituye la raíz
de todo mal. La riqueza resultará una bendición si la consideramos
como del Señor, para ser recibida con agradecimiento y devuelta
con igual agradecimiento al Dador.
¿Pero qué valor tiene la riqueza más incomensurable, si se acu-
mula en costosas mansiones o en títulos bancarios? ¿Qué peso tienen
estas cosas en comparación con un alma por la cual murió el Hijo
del Dios infinito?
A los que han amontonado riquezas para los últimos días, el
Señor declara: “Vuestras riquezas están podridas: vuestras ropas
están comidas de polilla. Vuestro oro y plata están corrompidos de
orín; y su orín os será en testimonio, y comerá del todo vuestras
carnes como fuego.”
Santiago 5:2, 3
.
El Señor nos ordena: “Vended lo que poseéis, y dad limosna;
haceos bolsas que no se envejecen, tesoro en los cielos que nunca
falta; donde ladrón no llega, ni polilla corrompe. Porque donde está
vuestro tesoro, allí también estará vuestro corazón. Estén ceñidos
vuestros lomos, y vuestras antorchas encendidas; y vosotros seme-
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jantes a hombres que esperan cuando su Señor ha de volver de las
bodas; para que cuando viniere y llamare, luego le abran. Bienaven-
turados aquellos siervos, a los cuales cuando el Señor viniere, hallare
velando: de cierto os digo, que se ceñirá, y hará que se sienten a la
mesa, y pasando les servirá. Y aunque venga a la segunda vigilia, y
aunque venga a la tercera vigilia, y los hallare así, bienaventurados
son los tales siervos. Esto empero sabed, que si supiese el padre de
familia a qué hora había de venir el ladrón, velaría ciertamente, y
no dejaría minar su casa. Vosotros pues también, estad apercibidos;
porque a la hora que no pensáis, el Hijo del hombre vendrá.”
Lucas
12:33-40
.
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