Capítulo 39—Preguntas acerca de los salvados
¿Se salvarán los hijos de los incrédulos
Tuve algunas conversaciones con el pastor (J. G.) Matteson
con respecto a si los niños de los padres incrédulos se salvarían.
Relaté que una hermana me había hecho esta pregunta con gran
preocupación, y me había declarado que algunos le habían dicho
que los hijitos de los incrédulos se perderían.
Debemos considerar ésta como una de las preguntas acerca de
las cuales no estamos en libertad de tomar una posición o expresar
una opinión, por la simple razón de que Dios no nos ha hablado
definidamente acerca de este asunto en su Palabra. Si él hubiera
pensado que es esencial que lo supiéramos, él nos hubiera hablado
con claridad del asunto.
Las cosas que él ha revelado son para nosotros y para nuestros
hijos. Hay cosas que no entendemos ahora. Ignoramos muchas cosas
que son claramente reveladas. Cuando se agoten estos asuntos que
se relacionan estrechamente con nuestro bienestar eterno, habrá
suficiente tiempo para considerar puntos acerca de los cuales hay
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personas que han expresado una innecesaria perplejidad.
Los hijos de padres creyentes
—Sé que algunos ponían en duda
aun si los hijitos de los padres creyentes se salvarían, porque ellos
[los hijos] no han tenido ninguna prueba del carácter, ya que todos
deben pasar por esa prueba para que se evalúe su carácter en base a
las pruebas. Se hace la pregunta: “¿Cómo pueden los niñitos pasar
por esa prueba para ser examinados?” Contesto que la fe de los
padres creyentes cubre a los niños, como cuando Dios envió sus
juicios sobre los primogénitos de Egipto.
Los israelitas que estaban en el cautiverio recibieron la orden
de Dios de reunir a sus hijos en sus hogares y señalar los postes de
las puertas de sus casas con la sangre de un cordero inmolado. Esto
prefiguraba la muerte del Hijo de Dios y la eficacia de su sangre, que
fue derramada para la salvación del pecador. Era una señal de que la
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