Página 12 - Testimonios para la Iglesia, Tomo 3 (2004)

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Testimonios para la Iglesia, Tomo 3
un solo hombre como el gran líder.
Las experiencias de este período son semejantes a las del águi-
la que está enseñando a volar a sus pichones, primero llevándolos
sobre su lomo y luego dejándolos que desarrollen su fuerza, pero
con el padre suficientemente cerca como para prestar ayuda cuando
es necesario. La propia salud decadente de Jaime White, su convic-
ción de que otros debían adelantarse para levantar las cargas, y los
frecuentes pedidos que se le hacían para que prestara servicio en
otras partes, todo tendía a separarlo de los intereses administrativos
en Battle Creek. Mientras el pastor White y su esposa continuaban
manteniendo su hogar a mitad de camino entre el sanatorio y la casa
publicadora, en la ciudad donde estaban las oficinas centrales, a me-
nudo los encontramos en lugares distantes. En los veranos de 1872 y
1873 pasaron períodos de descanso en las montañas de Colorado, y
por algunos meses estuvieron también en California. Un período aún
más largo lo pasaron en la costa occidental en 1874, donde el pastor
White comenzó la publicación de
Signs of the Times
. De ese modo
otros se vieron forzados a asumir responsabilidades de liderazgo en
las oficinas centrales, y la obra se fortaleció.
Éste también fue un período crítico porque, mientras la iglesia
comenzaba a definir su rumbo en asuntos de liderazgo y organi-
zación, algunos se inclinaban por darle demasiado énfasis a una
independencia individual, y estaban en peligro de repetir la expe-
riencia de Coré, Datán y Abiram, rebelándose contra la autoridad
debidamente constituida. Esparcidos a lo largo del tomo 3 hay con-
sejos que inspiran una influencia definidamente estabilizadora a
través de estas experiencias. Aquí y allá se mencionan en declara-
ciones magníficas algunos de los grandes principios de organización
y liderazgo.
El período de tres años de los tiempos de este tomo también
marcó la conclusión de la primera década en la enseñanza y práctica
de la reforma pro salud. Se dieron consejos para precaverse con-
tra los extremos por una parte y contra la indiferencia por la otra.
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Vez tras vez, en artículos generales y testimonios personales, Elena
G. de White apuntó a los grandes principios de la temperancia y
del correcto estilo de vida, y exhortó a la gente a progresar en su
experiencia nueva y útil de la reforma pro salud.