Página 420 - Testimonios para la Iglesia, Tomo 4 (2007)

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Testimonios para la Iglesia, Tomo 4
una constitución debilitada, sería mejor que jamás hubiesen ingresa-
do en la escuela. Algunos padres piensan que la educación de sus
hijos es muy cara y los presionan para que estudien. Los alumnos
están deseosos de estudiar mucho para completar su formación en
el menor tiempo posible. Los profesores han permitido que algunos
avancen demasiado deprisa. Mientras algunos necesitan que se los
empuje, otros precisan que se los frene. Los alumnos deben ser
siempre diligentes pero no deben embutir sus mentes de manera que
se conviertan en dispépticos intelectuales. Los estudios no deben
presionarlos tanto que descuiden el cultivo de las buena maneras;
y, por encima de todo, no deben permitir que nada interfiera en el
tiempo que dediquen a la oración porque los pone en contacto con
Jesucristo, el mejor maestro que jamás haya conocido el mundo.
En ningún caso deben privarse de los privilegios religiosos. Mu-
chos alumnos han hecho de sus estudios el primer gran objetivo
y han descuidado la oración, a la vez que se han ausentado de la
escuela sabática y las reuniones de oración. Al descuidar sus de-
beres religiosos han regresado a sus casas alejados de Dios. Se ha
descuidado una de las partes más importantes de su educación. La
base de todo conocimiento verdadero no debería ser considerada
como algo secundario. “El temor de Jehová es el principio de la
sabiduría”.
Proverbios 9:10
. “Buscad primeramente el reino de Dios
y su justicia”.
Mateo 6:33
. Esto no debe ocupar el último lugar, sino
el primero. El alumno debe tener la posibilidad de familiarizarse con
su Biblia. Necesita tiempo para ello. Un alumno que haga de Dios
su fuerza, que es inteligente en el conocimiento de Dios revelado en
su palabra, pone los cimientos de una buena educación.
Dios ha establecido que el colegio de Battle Creek alcance una
cota más elevada de cultura moral e intelectual que cualquier otra ins-
titución del mismo tipo en nuestro país. Los jóvenes deben aprender
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la importancia de cultivar sus facultades físicas, mentales y morales
para que sean capaces de alcanzar los más altos logros en la ciencia,
y por medio del conocimiento de Dios, se puedan educar para glori-
ficarlo, de manera que puedan desarrollar caracteres simétricos y así
estar totalmente preparados para ser útiles en este mundo y ganar la
adecuación moral para la vida inmortal.
Ojalá pudiera encontrar las palabras para expresar la importan-
cia de nuestro colegio. Todos deberíamos sentir que es uno de los