Página 71 - Testimonios para la Iglesia, Tomo 6 (2004)

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Los congresos campestres
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rotas. Si reveláis el amor de Cristo, podéis guiar a los hambrientos y
sedientos a Jesús, y él les dará el pan de vida y el agua de salvación.
Los esfuerzos personales
Los siervos del Señor no sólo deben predicar la Palabra desde el
púlpito, sino también deben mantenerse en contacto personal con
la gente. Cuando se predica un sermón, se siembra una preciosa
semilla; pero, si no se realiza un esfuerzo personal para cultivar
el terreno, la semilla no se arraiga. A menos que el corazón sea
enternecido y subyugado por el Espíritu de Dios, la mayor parte del
sermón se perderá. Observad a las personas que en la congregación
dan muestras de estar interesadas, y habladles después del servi-
cio. Unas pocas palabras en privado harán mucho más que todo el
sermón. Indagad cómo les han parecido los temas a los oyentes, y
preguntadles si el asunto ha quedado claro en sus mentes. Actuando
con bondad y cortesía mostradles que tenéis genuino interés en ellos
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y preocupación por sus almas. Muchos han sido inducidos a pensar
que como pueblo no creemos en la conversión. Cuando les pidamos
que vengan a Cristo, sus corazones se enternecerán y el prejuicio se
desvanecerá.
Estudios bíblicos
Siempre que sea práctico, cada discurso importante debe ser
seguido por un estudio bíblico. En esta ocasión, los puntos que se
han presentado pueden ampliarse, pueden formularse preguntas e
inculcarse las ideas correctas. Debe emplearse más tiempo para
educar a la gente con paciencia, dándoles oportunidad de expresarse.
Lo que la gente necesita es instrucción. Línea sobre línea, precepto
tras precepto.
Es necesario tener reuniones especiales para las personas que
se interesan en las verdades presentadas y necesitan instrucción.
Debe invitarse a la gente a estas reuniones; y todos, creyentes y
no creyentes, debieran tener oportunidad de hacer preguntas sobre
asuntos que no hayan comprendido completamente. Permitid que
todos expresen las dudas que puedan tener. En todos los sermones
y estudios bíblicos, permitid que la gente vea que todos los temas