Página 239 - Testimonios para la Iglesia, Tomo 7 (1998)

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Tened buen ánimo
Quiero decir a los que trabajan en el Sur: No se descorazonen
por la debilidad que se ve actualmente en la obra. A ustedes les ha
tocado luchar contra dificultades que en ocasiones han amenazado
vencerlos. Pero la ayuda de Dios los ha capacitado para seguir ade-
lante. Si todos los que militan en nuestras filas supieran cuán difícil
resultó en años pasados establecer la obra en algunos lugares que
más tarde se han transformado en centros importantes, comprende-
rían que se necesita valor para hacerle frente a una situación poco
atractiva y declarar, levantando las manos al cielo: “No fracasaremos
ni nos desalentaremos”. Los que no han tenido que romper terreno
en campos nuevos y difíciles no se dan cuenta de las dificultades
del trabajo del pionero. Si pudieran comprender la forma divina de
obrar no sólo se regocijarían por lo que se ha hecho hasta ahora, sino
que también hallarían una causa de regocijo en el futuro de la obra.
Hermanos míos, no hay ninguna razón para desalentarse. Se
está sembrando la buena semilla. Dios velará sobre ella, haciéndola
brotar y producir una cosecha abundante. Recuerden que en sus
comienzos muchas de las empresas llevadas a cabo en favor de la
salvación de las almas, se han realizado en medio de las mayores
dificultades.
Se me ha indicado decirles: actúen cautelosamente, haciendo
siempre lo que el Señor les ordene. Avancen valerosamente, seguros
de que el Señor acompañará a los que le aman y le sirven. El obrará
en favor de su pueblo que guarda su pacto. No permitirá que se
transformen en una causa de descrédito. El purificará a todos los que
se sometan a su voluntad y los transformará en un motivo de alabanza
sobre la tierra. En este mundo no hay nada que le sea más querido a
Dios que su iglesia. El obrará con poder extraordinario a través de
hombres humildes y fieles. Hoy Cristo les dice a ustedes: “Yo estoy
con vosotros, cooperando con vuestros esfuerzos fieles y obedientes,
y concediéndoos preciosas victorias. Yo os fortaleceré a medida que
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os santificáis en mi servicio. Os concederé buen éxito en vuestros
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