Página 129 - Consejos sobre Mayordom

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Frente al día del juicio
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los humildes mostrando un espíritu de benevolencia y virtud. Pero
por el contrario, oprimen a los jornaleros; retienen fraudulentamente
la paga justa por el trabajo, engañan a los inocentes, roban a las
viudas y amontonan riquezas que se corrompen con la sangre de
las almas. Tendrán que comparecer ante el tribunal de Dios. Esta
clase de personas no está haciendo la voluntad del Padre celestial, y
escucharán la severa condenación: “Apartaos de mí, hacedores de
maldad”.
Mateo 7:23
.—
The Review and Herald, 14 de febrero de
1888
.
Revelaciones asombrosas
¡Qué revelaciones se harán en el día del juicio! Se descubrirá que
muchos que se han llamado a sí mismos cristianos no son siervos
de Dios, sino siervos de sí mismos. El yo ha sido su centro; el
servicio egoísta ha sido la obra de su vida. Al vivir para agradarse
a sí mismos y para ganar todo lo que podían para ellos mismos,
han invalidado y empequeñecido las capacidades y las facultades
que Dios les encomendó. No han tratado honradamente con Dios.
Sus vidas han constituido un largo sistema de robo. Estos ahora se
quejan contra Dios y sus semejantes, porque no se los reconoce ni
se los favorece como piensan que deberían. Pero su infidelidad será
revelada en aquel día cuando el Señor juzgue los casos de todos. El
volverá y discernirá “la diferencia entre el justo y el malo, entre el
que sirve a Dios y el que no le sirve”.
Malaquías 3:18
. En aquel día,
los que piensan que Dios aceptará ofrendas mezquinas y un servicio
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prestado de mala gana quedarán chasqueados. Dios no colocará su
aprobación sobre la obra de ningún hombre, encumbrado o humilde,
rico o pobre que no haya sido hecha de todo corazón, con fidelidad
y tomando en cuenta su gloria. Pero los que han pertenecido a la
familia de Dios aquí abajo, que se han esforzado para honrar su
nombre, han obtenido una experiencia que los hará como reyes
y sacerdotes para con Dios, y ellos serán aceptados como siervos
fieles. Para ellos se pronunciarán estas palabras: “Bien, buen siervo
y fiel... entra en el gozo de tu Señor”.
Mateo 25:21
.—
The Review
and Herald, 5 de enero de 1897
.