Página 228 - Consejos sobre Mayordom

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Consejos sobre Mayordomía Cristiana
taciones, chascos, pruebas y pérdidas. A eso sigue una inquietud
febril, un gran deseo de ganar recursos con más rapidez que lo que
las circunstancias presentes podrían permitir. Con este propósito
en vista, cambian sus circunstancias con la esperanza de ganar más
dinero. Pero con frecuencia no se cumplen sus expectativas y se
desaniman retrocediendo en lugar de adelantar. Tal ha sido el caso
con algunos en _____. Se están apartando de Dios.
Si el Señor hubiera prosperado a algunos de nuestros queridos
hermanos en sus especulaciones, habría determinado con esto su
ruina eterna. Dios ama a su pueblo y ama a los desafortunados.
Si ellos aprenden las lecciones que él desea enseñarles, su derrota
terminará por convertirse en una victoria preciosa. El amor al mundo
ha desplazado el amor a Cristo. Cuando se quitan las escorias de
la puerta del corazón, y ésta se abre ampliamente en respuesta a la
invitación de Cristo, él entra y se posesiona del templo del alma.—
Testimonies for the Church 4:616-618
.
Encantos y sobornos engañosos
Ahora mismo, durante el tiempo de gracia, todos estamos siendo
probados. Satanás está obrando con sus encantos y sobornos seduc-
tores, y algunos pensarán que han hecho una especulación admirable
por medio de sus planes. Pero ocurre que cuando creen que están
surgiendo con seguridad y se están elevando en su egoísmo, llegan a
saber que Dios puede esparcir con más rapidez que con la que ellos
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pueden juntar.—
Special Testimonies, Serie B, 17:6
.
Perspectivas engañosas
Muchas personas, obrando a conciencia, han prestado su dinero
a nuestras instituciones, a fin de que éste fuese empleado para hacer
una buena obra para el Maestro. Pero Satanás pone en obra proyectos
que producirán en las mentes de nuestros hermanos un gran deseo
de probar fortuna, tal como en la lotería. Uno y luego otro son
halagados por una gran esperanza de ganancia financiera si invierten
su dinero en terrenos; de manera que retiran sus recursos de nuestras
instituciones y los sepultan en la tierra, donde la causa del Señor no
recibe ningún beneficio.