Página 134 - Conducci

Basic HTML Version

130
Conducción del Niño
de todas las labores misioneras. Sus hijos, cabalmente educados para
ocupar sus lugares en la sociedad, constituyen la mayor evidencia
del cristianismo que pueda darse al mundo.—
Pacific Health Journal,
junio de 1890
.
La influencia de un hijo debidamente educado
—No hay otra
obra más elevada que haya sido encomendada a los mortales que
la formación del carácter. Los hijos no sólo deben ser educados
sino también formados; ¿y quién puede predecir el futuro de un
niño o un joven? Ejerced el mayor cuidado sobre la formación de
vuestros hijos. Un niño, debidamente disciplinado en los principios
de la verdad, que tiene el amor y el temor de Dios entretejidos en su
carácter, poseerá un poder para el bien en el mundo que no puede
estimarse.—
The Signs of the Times, 13 de julio de 1888
.
[150]