Página 51 - Cristo Nuestro Salvador (1976)

Basic HTML Version

El buen pastor
47
Mesías. Por eso mandó a unos de sus discípulos al Salvador con la
pregunta: “¿Eres tú Aquel que había de venir, o hemos de esperar a
otro?”
Cuando los mensajeros llegaron al Salvador le encontraron ro-
deado de muchos enfermos a quienes estaba sanando. Estuvieron
esperándole todo el día, mientras obraba con actividad incansable
socorriendo a los que sufrían. Al fin les dijo:
“Id y declarad a Juan las cosas que veis y oís: los ciegos reciben
la vista, los cojos andan, los leprosos son limpiados, los sordos
oyen, los muertos son resucitados, y a los pobres es predicado el
evangelio.”
Mateo 11:3-5
.
De este modo y por espacio de tres años y medio, Jesús “anduvo
haciendo bienes por todas partes.” Entonces llegó el momento en
que debía concluír su ministerio en la tierra. Tuvo que ir con sus
discípulos a Jerusalén para ser entregado, condenado y crucificado.
Así fué como se cumplieron sus propias palabras: “El buen
pastor da su vida por las ovejas.”
Juan 10:11
.
“Ciertamente él ha llevado nuestros padecimientos, y con nues-
tros dolores él se cargó... Pero fué traspasado por nuestras trans-
[71]
gresiones, quebrantado fué por nuestras iniquidades, el castigo de
nuestra paz cayó sobre él, y por sus llagas nosotros sanamos. Noso-
tros todos, como ovejas, nos hemos extraviado; nos hemos apartado
cada cual por su propio camino; y Jehová cargó sobre él la iniquidad
de todos nosotros.”
Isaías 53:4-6
.
[72]