Página 63 - Cristo Nuestro Salvador (1976)

Basic HTML Version

La cena pascual
59
para todos los presentes. El rostro del Salvador se iluminó y la
sombra se desvaneció de sus discípulos.
Cristo habló entonces con sus discípulos un rato más. Les dijo
que iba a la morada de su Padre para prepararles un lugar y que
luego regresaría a llevarlos para que vivieran con él allí.
Prometió mandar al Espíritu Santo para que fuera su maestro y
consolador mientras él estuviera ausente. Les dijo que debían orar
en su nombre y que entonces sus oraciones serían oídas.
Luego oró por ellos con fervor pidiendo que fueran guardados
[89]
del mal y que se amaran como él mismo los había amado.
Jesús oró también por nosotros como por los primeros discípulos
pues dijo: “Mas no ruego solamente por éstos, sino por aquellos
también que han de creer en mí por medio de la palabra de ellos;
para que todos ellos sean uno; así como tú, oh Padre, eres en mí, y
yo en ti, para que ellos también sean uno en nosotros; para que el
mundo crea que tú me enviaste... y que los has amado a ellos, así
como me has amado a mí.”
Juan 17:20, 23
.
[90]