Página 180 - Consejos Sobre la Obra de la Escuela Sabatica (1992)

Basic HTML Version

La más alta eficacia del don amoroso
Dios se deleita en honrar la ofrenda del corazón que ama, dándole
la mayor eficacia en su servicio. Si hemos dado nuestro corazón
a Jesús, le traeremos también nuestros donativos. Nuestro oro y
plata, nuestras posesiones terrenales más preciosas, nuestros dotes
mentales y espirituales más elevados, serán dedicados libremente a
Aquel que nos amó y se dió a sí mismo por nosotros.—
El Deseado
de Todas las Gentes, 51, 52
.
176