Página 335 - Consejos para la Iglesia (1991)

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La organización de la iglesia
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consiste en permitir que cada uno siga su propia conducta, y en
permanecer especialmente distintos de los cuerpos de cristianos que
están unidos y trabajan para establecer la disciplina y la armonía
de acción. Todos los esfuerzos hechos para establecer el orden son
considerados peligrosos, una restricción de la libertad que es lícito
gozar, y por lo tanto se los teme como papismo. Estas almas tan
celosas consideran que es una virtud jactarse de su libertad para
pensar y actuar en forma independiente. No aceptan indicaciones de
nadie. No se consideran responsables ante ningún hombre. Se me
mostró que es la obra especial de Satanás inducir a los hombres a
sentir que Dios les ha ordenado hacer cosas por su cuenta y escoger
su propia forma de obrar independientemente de sus hermanos
Dios ha hecho de su iglesia en la tierra un canal de luz, y por su
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medio comunica sus propósitos y su voluntad. No le da a uno de sus
siervos una experiencia distinta a la del resto de la iglesia y contraria
a ella. Ni da a conocer a un solo hombre su voluntad con respecto a
la iglesia, mientras deja a ésta—el cuerpo de Cristo—en tinieblas.
En su providencia, pone a sus siervos en estrecha relación con su
iglesia, a fin de que tengan menos confianza en sí mismos y más
confianza en otros a quienes está guiando para promover su obra
Iglesias organizadas por los profetas
La organización de la iglesia de Jerusalén debía servir de mode-
lo para la de las iglesias que se fundaran en muchos otros lugares
donde los mensajeros de la verdad fuesen a trabajar a fin de ganar
conversos para el Evangelio. Los que habían asumido la responsabi-
lidad del gobierno general de la iglesia no habían de enseñorearse de
la heredad de Dios, sino que, como prudentes pastores, tenían que
apacentar la grey de Dios siendo “ejemplos de la grey” (
1 Pedro 5:2,
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), y los diáconos debían ser “varones de buen testimonio, llenos del
Espíritu Santo y de sabiduría”. Estos hombres debían mantenerse
unidos de parte de la justicia y permanecer firmes y decididos. Así
ejercerían una influencia unificadora sobre toda la grey
Como factor importante del crecimiento espiritual de los nuevos
conversos, los apóstoles se esforzaron por rodearlos con las sal-
vaguardias de las disposiciones evangélicas. Organizaron iglesias
en todos los lugares de Licaonia y Pisidia donde había creyentes.