La observancia del santo sábado de Dios
359
verdades contenidas en su Palabra, y dedicar una parte del tiempo a
la oración apropiada. Pero estos momentos, aun en sábado, no deben
ser hechos tediosos por su dilatación y falta de interés
Cuando no hay predicador en la iglesia, alguno debe ser nom-
[480]
brado director de la reunión. Pero no es necesario que predique un
sermón u ocupe gran parte del tiempo de culto. Un estudio corto e
interesante de la Biblia será con frecuencia de mayor beneficio que
un sermón. Puede ir seguido de una reunión de oración y testimonio.
Cada uno debe sentir que tiene una parte que desempeñar para
hacer interesantes las reuniones del sábado. No hemos de reunirnos
simplemente por formalismo, sino para un intercambio de pensa-
mientos, para relatar nuestra experiencia diaria, para expresar agra-
decimiento y nuestro sincero deseo de ser iluminados divinamente,
para que conozcamos a Dios y a Jesucristo al cual él envió. El pla-
ticar juntos acerca de Cristo fortalecerá el alma para las pruebas y
conflictos de la vida. Nunca pensemos que podemos ser cristianos
y encerrarnos, sin embargo, dentro de nosotros mismos. Cada uno
es parte de la gran trama de la humanidad, y su experiencia será
mayormente determinada por la experiencia de sus asociados
La Escuela Sabática
El objeto de la obra de la escuela sabática debe ser cosechar
almas. Puede ser que el modo de trabajar sea sin tacha, que las
facilidades sean todo lo que se pudiera desear; pero si los niños y
jóvenes no son llevados a Cristo, la escuela ha fracasado, porque a
menos que las almas sean atraídas a Cristo, llegan a ser más y más
insensibles como resultado de la influencia de una religión formal.
El maestro debería cooperar, mientras Cristo llama a la puerta del
corazón de los que necesitan ayuda. Si los alumnos responden a las
[481]
súplicas del Espíritu y abren la puerta del corazón para que entre
Jesús, él abrirá su entendimiento a fin de que comprendan las cosas
de Dios. La obra del maestro es sencilla, pero si éste la hace con el
espíritu de Jesús, le serán añadidas profundidad y eficiencia por la
operación del Espíritu de Dios.
Padres, apartad un poco de tiempo cada día para estudiar la
lección de la escuela sabática con vuestros hijos. Sacrificad la visita
social, si es necesario, antes que la hora dedicada a las preciosas